El viernes 10 de mayo, el periódico La Vanguardia se hacía eco, en un tono preocupado, de la noticia que ocupó los titulares de la zona esa jornada: la candidatura independista Eines de País ganaba las elecciones de la ‘Cambra de Comerç de Barcelona’.
La candidatura independentista impulsada por la Asamblea Nacional Catalana (ANC) sumaba 32 vocalías de las 40 sometidas a sufragio, registrando así una victoria imprevista. (¡El director de ElNacional.cat considera "franquista" manifestarse contra el relator de Pedro Sánchez!).
La pelea entre los medios, publicada en portada
La Vanguardia otorgaba a esta noticia parte de su portada afirmando: “la victoria de la ANC en la Cambra conmociona el mundo empresarial catalán”, pronosticando un futuro nada prometedor para el turismo y la Fira de la ciudad.
Ante este titular, el medio El Nacional no ha tardado en responder, haciendo mofa de las advertencias económicas publicadas por la Vanguardia; “En fin, más bien parece que es La vanguardia quién está conmocionada”, publicaban.
Tampoco se han quedado atrás criticando a otros medios, tanto regionales como nacionales, que publicaban esta noticia. ‘El Periódico’ catalogó esta victoria de “marea amarilla”, lo cual no tardó en ser respondido por los redactores de ‘El Nacional’ afirmando que “El Periódico habla de marea amarilla en la Cambra, como quien se alarma por una epidemia letal o una invasión de hooligans bebidos y armados”.
No conocemos qué deparara en el futuro económico de Barcelona esta victoria de la ANC en la Cambra, pero lo que sí sabemos es que, a día de hoy, el primer cadáver es la información libre, siendo lapidada por la partidaria visión de unos pocos bufones que se mofan de sus compañeros de profesión.