España está atravesando, por culpa de la pandemia del coronavirus y las medidas restrictivas impuestas para frenar su avance, una de las peores crisis económicas que se recuerdan en toda su Historia, con el IPC por las nubes, así como la factura de la luz o el precio del diésel, entre otros.
Una complicada situación que está haciendo que muchos hogares españoles estén atravesando verdaderos momentos de dificultad económica... sin que ello parezca preocupar en demasía al Ejecutivo nacional, que sigue derrochando miles de euros públicos en iniciativas sin oficio ni beneficio real para la ciudadanía, a la vez que promueve nuevas subidas de impuestos contra los ciudadanos.
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Desinterés del que también hace gala el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, que no parece estar dispuesto a 'apretarse el cinturón', o a renunciar a su bronceado, en solidaridad a los difíciles momentos que atraviesan sus votantes.
Así pues, mientras el país se hunde en la crisis económica provocada por sus medidas contra el Covid, el presidente socialista aprueba reformas en el Palacio de las Marismillas, en Huelva, para mejorar el solárium privado del que disfrutan él y su familia durante las vacaciones de verano, y con el que consiguen un maravilloso bronceado a costa de todos los españoles.
El palacio presidencial, puesto a punto para el verano
Tal y como ha podido saber OKDiario, el Gobierno de España gastará 335.083 euros en reformar el palacio, incluyéndose 13 actuaciones en el documento de Parques Nacionales al que ha tenido acceso el citado diario.
"Trabajos en solárium, sala anexa y comedor" destaca el escrito, que incluye otros trabajos relacionados con el mantenimiento de la cubierta o la restauración de las zonas afectadas por las termitas,"en peligro de desprendimiento".
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Unas reformas que se unen a otros 376.423 euros que el Ejecutivo destinaba a la colocación, en el mismo Palacio de Doñana, de placas solares, de nuevo, para el disfrute del presidente socialista.
Actuaciones registradas en el organismo de Parques Nacionales que comenzaban el pasado mes de noviembre, y que se contempla que terminen a tiempo para el verano, haciendo así posible que Sánchez y su familia disfruten de la renovada residencia, una de sus estancias favoritas, durante sus vacaciones, rodeados de lujos y comodidades que miles de españoles no podrán ni imaginar en estos momentos de crisis y ahogo económico.