Ya se conocen los integrantes del Gobierno que asisitirán a la mesa de negociación con los partidos independentistas catalanes.
Son, en concreto, cinco integrantes del Ejecutivo: el mismísimo Pedro Sánchez, que estará presente en el primer encuentro; Carmen Calvo, como vicepresidenta primera; Pablo Iglesias, como vicepresidente segundo y mayor representante de Podemos; el ministro de Sanidad, Salvador Illa, la ministra de Política Territorial, Carolina Darias y el ministro de Universidades, Manuel Castells.
Este último nombramiento ha sido muy celebrado por los independentistas catalanes, como la ANC y Òmnium Cultural, ya que en múltiples ocasiones el catedrático ha defendido el derecho de autodeterminación catalán, y fue propuesto nada más y nada menos que por Ada Colau para su actual puesto dentro de las confluencias de Unidas Podemos.
Todo un guiño al independentismo por parte del Gobierno socialista que ha aplaudido Elisenda Paluzie, presidenta de la ANC, que confía en que Castells defienda "la autodeterminación" desde su posición en la mesa de negociación.
La presencia del ministro de Universidades es una de las razones por las que la ANC argumentó que no era necesario que los comuns estuvieran en la mesa de asesoramiento del Govern; "no tiene sentido que los mismos se sienten en los dos lados de la negociación" ha afirmado Paluzie en una entrevista en Ràdio 4, recogida por Europa Press.
Castells usa el Ejecutivo socialista como escudo
A pesar de que es conocida su simpatía por el independentismo catalán, el ministro de Universidades no ha querido mostrar ahora sus preferencias ante la cercanía de la mesa de negociación.
"Mi posición será la del Gobierno" ha afirmado este viernes a los periodistas en el Congreso, afirmando que todos en el Ejecutivo de Sánchez son "constitucionalistas" porque prometieron la Constitución al tomar posesión de sus carteras. (El payaso Llach vende su estaca a los violentos de la Meridiana)
"Todos en el Gobierno somos constitucionalistas" ha reiterado en varias ocasiones Castells, a la vez que aseguraba que se informará "con transparencia" a los ciudadanos españoles de todo lo que ocurra en la mesa de negociación.