El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y el líder de Unidas Podemos, Pablo Iglesias, han tendido la mano durante estos últimos meses a las fuerzas políticas independentistas para alcanzar pactos.
Esa aproximación a los partidos políticos nacionalistas ha pasado factura en las elecciones autonómicas que se han celebrado el domingo 12 de julio en Galicia y en el País Vasco. (Urkullu y Feijóo arrollan en las elecciones vascas y gallegas)
El BNG ha sido uno de los grandes triunfadores de los comicios gallegos tras superar a los socialistas, a los que aventajan en 5 escaños. Asimismo, se han aprovechado del batacazo de Podemos.
Gran parte de los diputados que ha perdido Podemos, que ha pasado de 14 escaños a no tener representación parlamentaria en Galicia, han ido a parar al BNG este domingo.
Situación similar es la de las elecciones vascas. El PSOE se ha mantenido (ha pasado de 9 a 10 escaños) mientras que Unidas Podemos ha caído de los 11 a los 6 diputados.
EH Bildu, la formación proetarra, se ha aprovechado de ello y ha ganado cuatro escaños respecto a las últimas elecciones. Los votantes descontentos de Podemos han optado por votar a los herederos de ETA.
En este primer examen al Gobierno socialcomunista de Pedro Sánchez y Pablo Iglesias ha quedado claro que los grandes beneficiados son los partidos independentistas.
Ese acercamiento de Pablo Iglesias, con la aprobación de Pedro Sánchez, a las formaciones nacionalistas ha llevado de cientos de votantes a cambiar de opinión y dar su voto a los que defienden la fractura de España.
El constitucionalismo pierde fuerza
Este año también se celebrarán elecciones en Cataluña y todo apunta, según los sondeos, a que Esquerra Republicana será la fuerza política más votada en la citada comunidad autónoma. (Tocado...¿Y hundido? Pablo Iglesias lleva a Podemos a la ruina)
Hay que recordar que ERC es uno de los socios de Pedro Sánchez durante esta legislatura por lo que seguiría la tendencia a la alta de los partidos independentistas 'amigos' de Sánchez e Iglesias.