Gerard Piqué es un personaje. Eso creemos que todos lo tenemos claro. El excentral del FC Barcelona parece que no lleva nada bien el hecho de estar alejado de los focos. Le gusta ser el centro de atención y "dar la nota" para que la gente hable de él. Prueba de ello, es que en su último partido con el conjunto culé se autoexpulsó él solito. No jugó y quiso salir en las portadas de los periódicos tras dirigirse al árbitro en unos términos indeseables. Él con tal de ser el protagonista es capaz de todo.
Esto es lo que ha ocurrido en la primera jornada de la 'Kings League', esa competición de streamers en la que participa junto a rostros conocidos como Iker Casillas, Sergio Agüero, Ibai Llanos, Joan Capdevila, etcétera. Algunos ejercen como presidentes, otros lo hacen como jugadores o entrenadores. Todos desempeñan un papel diferente.
El protagonista de esta noticia está tan inmerso en este mundo de los streamers que ya habla como si de uno más se tratara. De hecho, el pasado viernes su nombre se convirtió en tendencia en redes sociales tras publicar un tweet poco agradable: "Un gilip... me ha hecho spoiler de Naruto y me ha jodido todo el finde...", manifestó el exjugador del Barça en la plataforma del ave azul. Por lo que parece, la vida de Piqué ha cambiado una barbaridad y ahora suponemos que está entretenido viendo series para adolescentes y alguno de sus nuevos amigos le ha adelantado cualquier secuencia de la trama.
Este mensaje no es fruto de la casualidad. Este tipo de comportamiento del exjugador está destinado a los adolescentes, puesto que él quiere potenciar sus inversiones. De este modo, aunque creamos que no sabe ni lo que hace, todo tiene un sentido que no es otro que seguir ganando dinero.
La realidad es que el 2022 fue bastante duro para 'Geri'. Dijo adiós al FC Barcelona por motivos no meramente deportivos, y su relación con Shakira ponía punto final tras 12 años. De este modo, se puede decir que la vida del catalán ha cambiado considerablemente.
Piqué engañó al Barcelona
Tras la marcha de Gerard del cuadro blaugrana nos vendieron que se iba por la puerta grande. Además, quisieron dejar claro que no era un pesetero, ya que perdonaba lo que le quedaba de contrato. De este modo, intentaron que el sentimiento culé del exdefensor saliera a relucir.
El último engaño de Piqué al Barcelona: el central se sigue riendo de los azulgrana
Sin embargo, ya lo dice el refranero español: "se pilla antes a un mentiroso que a un cojo". Y así fue. A raíz de la advertencia de La Liga a Joan Laporta acerca de que podían superar el límite salarial, se ha dado a conocer que Piqué no renunció a su salario, sino que decidió dejar las variables que tenía firmadas, o sea, esos bonus por rendimiento, que supondría un total de 5 millones de euros. Por tanto, el zaguero, aunque digan lo contrario, aplicó eso de "la pela es la pela" y dejó al Barcelona más asfixiado económicamente si cabe.