Los radicales independentistas de los CDR llevan más de 3 meses cortando la Meridiana, una de las calles principales de Barcelona, ante la frustración de cientos de ciudadanos que se ven afectados día tras día por los cortes.
Esta situación está provocando que el ambiente de crispación aumente en la Ciudad Condal, ya que son muchos los vecinos de la ciudad que avisan al Ayuntamiento y a la Guardia Urbana de que ellos mismos tomarán cartas en el asunto, de no solventarse esta situación.
Respuesta de la ciudadanía que los CDR no temen en absoluto, ya que, según mensajes que han interceptado y publicado desde Dolça Catalunya, los radicales se describen a sí mismos como gente "no pacífica".
"Puta España y puta policía" escriben en los mensajes interceptados, haciendo mención a la Guardia Urbana, que no puede intervenir ante los constantes actos violentos y radicales del grupo independentista.
Todo esto sucede mientras desde la Generalitat de Quim Torra se aprueban permisos para que los CDR mantengan los cortes y las manifestaciones en las calles de Barcelona, al menos, hasta el 18 de marzo.
El CSIF avisa de las consecuencias del "abandono" de la Generalitat
El Sindicato mayoritario de la Guardia Urbana de Barcelona, CSIF está preocupado por el evidente "abandono de la Generalitat y Ayuntamiento en los altercados de la Meridiana".
Así pues, los agentes avisan de que "la situación que se está viviendo a nivel policial es de caos total" ya que "los manifestantes" les esperan cada noche con posturas "muy violentas", mientras que "la BRIMO y/o la ARRO de los Mossos" aparecen "pero no intervienen". (SCC se propone dejar sin esquí a los pijos independentistas)
"El Consistorio tampoco deja que intervengan las unidades especiales antidisturbos de la GUB para que protejan a sus compañeros. Los agentes de tráfico de la GUB, que es la que está en primera línea, son los que sufren la violencia de los manifestantes, y son los testigos de ver cómo los manifestantes arremeten contra vecinos y causan daño tanto a mobiliario urbano como a bienes privados, sin poder hacer nada".
Además, avisan de que el "clima de crispación va in crescendo" y que va a provocar "un enfrentamiento civil importante en este punto de la ciudad" ya que la propia ciudadanía "le transmite a la GUB que van a responder ellos mismos ya que nadie hace nada".