La alcaldesa de Vilassar de Dalt, Carola Llauró, presentó una denuncia contra tres activistas con ideales contrarios al independentismo por descolgar una pancarta de apoyo a los presos golpistas.
Los activistas, al ver la pancarta en la fachada del ayuntamiento de esta localidad de la comarca del Maresme, decidieron retirarla ya que contenía una proclama política y partidista. (¡Qué aburrimiento! ¡Torra cuelga otra pancarta en la Generalitat!)
Las pancartas con este tipo de mensajes están prohibidas en las instituciones democráticas, ya que se supone que los edificios públicos deben mantener la neutralidad.
Los hechos ocurrieron el 28 de julio del año pasado cuando varios activistas intentaron descolgar la citada pancarta. En ese momento, se personó una patrulla de la Guardia Urbana e identificó a tres de ellos.
Ahora, la justicia ha decidido absolver a los tres activistas ya que "no consta probado quién realizó los actos materiales de descolgar la citada pancarta. No consta probado quién autorizó el establecimiento de dicha pancarta en el balcón municipal, ni cuándo se autorizó, ni con qué fondos se adquirió".
"No consta probado que el pleno del Ayuntamiento de Vilassar de Dalt autorizara la adquisición de dicha pancarta, ni su colocación en el balcón municipal, ni que autorizara a la alcaldesa, la denunciante doña Carola Llauró, a presentar denuncia y comparecer en juicio por estos hechos", se puede leer en la sentencia, según ha señalado El Confidencial.
Su 'jugada maestra' no ha salido como esperaba ya que se ha marchado del juzgado como imputada por una serie de irregularidades relacionadas tanto con la pancarta como por la denuncia a los activistas.
La alcadesa pidió que los tres activistas tuviesen que "indemnizar al Ayuntamiento de Vilassar" y confesó que intervenía en el pleito “no a título personal, sino como alcaldesa". (Una pancarta lamentable en el Camp Nou: ¿El Barcelona también está a favor de los CDR terroristas?)
La alcaldesa, imputada
Sin embargo, no aportó al juez el acta del pleno del ayuntamiento autorizándola para denunciar los hechos y para comparecer en este juicio ratificando la denuncia y reclamando los daños. "Cabe apreciar falta de legitimación activa de la señora Llauró en el presente juicio".
Asimismo, la alcaldesa reconoció en el juicio que no sabía “cuándo se colgó la pancarta en el balcón del ayuntamiento" y que "no se acordó en ningún pleno del ayuntamiento la compra y colocación de la citada pancarta". Tampoco pudo decir cuánto costó ni si se pagó con fondos del ayuntamiento. Por otro lado, confesó que la pancarta quedó muy dañada y que el consistorio compró otra por valor de 242 euros.