A su majestad, Felipe VI, lo conocemos como una persona, formal, seria y educada. Un padre de familia ejemplar, que vela por los intereses de sus seres queridos. Sin embargo, y como todos nosotros, el monarca también presenta sus 'hobbies' con los que disfruta pasando el tiempo libre. Por ejemplo, le gusta mucho la comida japonesa, adora el senderismo, ama la astronomía, de pequeño practicó la vela y el judo... y también baila salsa.
El Rey es un amante de este baile. De hecho, lo ejercía mucho cuando estaba soltero. Desde que se casó es verdad que lo ha dejado un poco de lado, pero siempre que ha podido se lo ha intentado enseñar a la reina Letizia, aunque a esta no es que le guste mucho.
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Lydia Lozano bailó con Felipe VI
Lydia Lozano, colaboradora de 'Sálvame', ha reconocido en alguna ocasión que don Felipe VI y ella coincidieron de fiesta. "Felipe iba a todos los garitos a los que yo iba, teníamos amigos comunes", afirmaba la canaria. Asimismo, añadió: "Una noche estábamos todos en la pista bailando y Felipe pidió una bachata, empecé a bailar con él". La periodista reconoce haberse sorprendido al ver el gran desempeño en la pista de su majestad.
Por ello, la tertuliana de MediaSet no dudó en preguntarle donde había enseñado a practicar esos pasos. El Rey, sin problema alguno le respondió: En Santo Domingo, durante Elcano". Es aquí cuando hay que recordar, que el monarca estuvo durante 1987 en el Juan Sebastián Elcano como parte de su formación militar y fue durante ese periplo de seis meses cuando Don Felipe aprendió este ritmo latino tan popular y sensual en nuestros días.
Más de tres décadas después no le hemos visto bailar. De hecho, en 2017, en una visita a Fitur los reyes cerraron su paseo por ese evento visitando el 'stand' de Argentina, que aquel año era el país invitado. Cuando llegó la comitiva, una pareja se encontraba bailando un tango. Los monarcas y sus acompañantes, de forma diplomática, esperaron a que terminase y, en ese momento, tuvo lugar la anécdota de la visita.
Como suele suceder en este tipo de actividades en las que el protocolo no se lleva a rajatabla, la bailarina se acercó a Don Felipe con la intención de marcarse unos pasos de baile con la figura regia. Nadie le había dicho lo contrario y, por lo tanto, invitar al Rey era una manera de expresar el agradecimiento por su presencia. En ese momento, y como pudieron comprobar parte del séquito y de los fotógrafos que rodeaban a la pareja, la Reina tiró de la chaqueta a su marido y le pidió que se fueran. En ese instante acabó la visita a Fitur hace ya 5 años.
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Por tanto, detrás del rostro serio de su majestad hay una persona a la que le gustaba el baile, concretamente la salsa, aunque es verdad, y así lo dice Lola Molinero en un artículo de El Mundo que el Rey en su época juvenil le reconoció lo siguiente: "Me gusta la música moderna buena y, por supuesto, también la música clásica. Cada una en su momento".