El independentismo catalán sigue recibiendo golpes de la instituciones públicas. En medio de las discusiones y polémicas decisiones del Govern por no acatar las medidas dictadas desde el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC) en relación con las leyes que obligan a impartir el 25% de las clases en la Comunidad Autónoma en castellano, los golpistas vuelven a recibir un ‘bofetón’ de los entes de gobierno.
Cataluña se encuentra cada vez más tensa por las decisiones de sus políticos y esos ‘líderes’ que buscan avivar la llama del procés. El independentismo en la región ha sufrido duros golpes desde aquel fatídico 1 de Octubre de 2017 donde se proclamó una republica imaginaria y sin ningún valor legal.
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El desobedecimiento a las medidas del Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC) en relación con la impartición de las clases en castellano fue solo el comienzo. En Cataluña parecen estar decididos a seguir tensando la cuerda, llevando a sus ciudadanos a volver a ser la carne cañón de un movimiento sin cabeza y con sus líderes siendo buscados por la justica.
Desde el TSJC han vuelto a darle un duro golpe a quienes buscan desestabilizar España. El Tribunal dio la razón a la asociación Impulso Ciudadano y sus peticiones de poder visibilizar en el Ayuntamiento de Cardedeu (Barcelona) su amor por la patria. Dos sentencias se han tenido que dar para que las normas fuesen cumplidas en otro seno del independentismo.
Cataluña = España
Y es que Impulso Ciudadano solicitó al ejecutivo de la pequeña localidad de Cataluña el poder colgar junto a la ‘Senyera’ una bandera de España. No pidieron remover la primera, sino aprovechar los espacios vacíos al lado de esta para que los colores de nuestro país posasen.
Si bien el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña había rechazado en primera instancia la petición de los demandantes, acabó aceptando los recursos presentados por Impulso Ciudadano para tomar una decisión que supone un nuevo golpe a los independentistas.
"Sin tener constancia de la existencia de acuerdo municipal que avalara la retirada o no colocación", denunciaban desde Impulso Ciudadano en relación con los rechazos a sus peticiones de poder colgar la bandera de España en una fachada donde también se hacían presentes distintos íconos del independentismo.
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Recordemos que el Gobierno municipal de Enric Olivé (ERC) y la CUP retiró hace años la bandera catalana y la española para colocar una independentista y otros símbolos de apoyo al 'procés'. Tras una larga lucha, los miembros de IC han podido finalmente conseguir que se haga justicia.
"Queremos que las banderas oficiales se exhiban en todos los ayuntamientos de Cataluña", declaraban desde Impulso Ciudadano antes de afirmar que en Cataluña solo 149 de los 947 municipios registrados cuentan con la bandera española en sus ayuntamientos. El independentismos se lleva un nuevo golpe y tendrán que aceptar nuevamente las medidas de la justicia.