El independentismo catalán ha recibido un golpe bajo. Dos deportistas catalanes, Mireia Belmonte y Saúl Craviotto, serán los abanderados de España en los Juegos Olímpicos. No puede haber mayor humillación para la secta separatista.
El anuncio del Comité Olímpico Español de que los abanderados de la delegación española en los Juegos Olímpicos de Tokio serán la nadadora catalana Mireia Belmonte y el piraguista catalán Saúl Craviotto ha soliviantado a las fuerzas vivas del separatismo, que han acogido la noticia con rabia.
Se trata de dos traidores de la causa independentista que no sólo defienden a España en sus competiciones, sino que, además, lucirán orgullosos en sus manos durante la ceremonia inaugural de los Juegos Olímpicos la bandera de España.
Entre los dos acumulan ocho medallas olímpicas en su palmarés, ocho medallas que son españolas, porque los dos son catalanes, mal que les pese a los defensores del supremacismo y sectarismo que quiere imponer a la fuerza su voluntad en Cataluña de forma unilateral.
En ERC y JxCat ven en esta decisión un golpe bajo que les ha asestado Pedro Sánchez, una provocación en toda regla. Mireia es de Badalona y Saúl de Lérida y los dos se sienten orgullosos de disfrutar del honor de ser los portadores de la bandera de España en Japón.
Craviotto y Belmonte, en la lista negra de los traidores a la causa
En su momento ambos recibieron duras críticas de los medios propagandísticos del independentismo, que utilizan el deporte para sacar pecho. Por ejemplo tras la actuación española en los últimos Juegos de Río, cuando un tercio de la delegación española era catalana y sus atletas participaron en 17 de las medallas conseguidas por España (3 oros, 1 plata y 4 bronces): oro de la nadadora Mireia Belmonte, el piragüista Saúl Craviotto y el tenista Marc López, la plata de las jugadoras catalanas de baloncesto y los bronces de Belmonte, Craviotto, el taekwondista Joel González y los catalanes del combinado de baloncesto masculino.
Mientras desde la Generalitat disparaban la euforia por el éxito de los deportistas catalanes en Río, el desencanto fue luego tremendo al regreso de sus atletas al aeropuerto de El Prat portando banderas españolas, ni una sola catalana y, por supuesto, ninguna independentista.
Desde entonces, Saúl Craviotto y Mireia Belmonte figuran en la lista negra de los traidores a la causa independentista.