Chelo García Cortés regresaba a Sálvame tras su paso por Supervivientes. Desde que volviese a España no ha dejado de recibir palos, aunque si bien es cierto, es que ella solita se ha buscado los berenjenales en los que se ha encontrado.
Tras varios frentes abiertos, Chelo volvía dispuesta a zanjar todas y cada una de las polémicas pero lo que no esperaba es todo lo que ocurrió durante su vuelta. La periodista se disponía a entrar en plató cuando algo muy desagradable para ella ocurrió.
La caída de Chelo que la mandó directa al hospital
Su tremenda caída revolucionó la tarde de este martes en el plató de Sálvame y es que tuvo que salir de Mediaset dirección a un hospital debido a la aparotosa herida que se hizo.
Kiko Hernández ejercía de presentador y era él mismo quien anunciaba la vuelta a plató de Chelo. Cuando se disponía a entrar, tropezó, se golpeó con un escalón de la puerta de entrada lo que le produjo un corte en la pierna izquierda.
El propio Kiko, visiblemente afectado por lo ocurrido, explicaba que Chelo se había hecho una herida de 10 centímetros que incluso dejaba ver el hueso de la colaboradora.
La preocupación fue máxima durante toda la tarde y se podía ver en el rostro de sus compañeros que respiraban aliviados cuando la vieron salir del hospital. "He tenido suerte, me han dicho que hay muchos puntos y parece que no hay rotura pero tengo que estar un poco tranquilita".
Un total de 28 puntos de sutura los que recibió Chelo. "Ahora tengo que esperar, tengo que venir mañana a cura, tengo que venir pasado y esperar 10 días a que me quiten los puntos que me han dado. No me han dolido porque me han anestesiado".
Con estas palabras, Chelo intentó calmar a los suyos y aseguró que tenía la necesidad de cortar la conexión porque se encontraba "un poco mareada".
De todos modos, aseguró que en cuanto pueda, será ella misma quien vaya a plató a contar cómo es su evolución.