Las figuras de las hijas de Felipe VI y Letizia Ortiz son analizas y escrutadas constantemente, puesto que se trata de las próximas líderes de un país que necesita más que nunca la monarquía para apoyar su crecimiento como nación y buscar la prosperidad de las futuras generaciones. Sin embargo, cada vez podemos descubrir nuevos aspectos que se desconocían de la princesa de Asturias y su hermana.
Con motivo de la celebración de la Eurocopa femenina en Inglaterra este mismo verano de 2022, las hijas de Felipe VI han acudido como representantes de la delegación española y asistirán a todos los partidos que juegue la Selección femenina en su camino por esta importante competición para nuestro fútbol. En el último encuentro disputado, en el que las jugadoras de la Roja se alzaron con una apretada victoria en los últimos minutos con un gol de Marta Cardona, tanto la infanta Sofía como la princesa de Asturias Leonor estuvieron presentes.
Después del encuentro, ambas bajaron para felicitar a las jugadoras, que siguen manteniendo la firmeza del fútbol español más allá de nuestras fronteras, demostrando que nuestro país todavía tiene cuerda para rato en los deportes de equipo y en sus escenarios más competitivos. Sin embargo, una de las dos hermanas lo vivió con más intensidad y alegría que otra.
A pesar de tener un perfil público más apartado y desconocido que su hermana, la infanta Sofía siempre ha sabido destacar y estar a la altura en la circunstancias que se le ha exigido. Poco se conocía de sus aficiones más allá de las que comparte con su hermana, quien está más sometida al escrutinio del ojo público puesto que es la heredera de la Corona española.
Sin embargo, con esta visita a las jugadoras de la Selección Española hemos podido comprobar que la infanta Sofía es una verdadera entusiasta del fútbol y que ha vivido con una inmensa alegría la oportunidad de poder presenciar en directo una de las mejores competiciones del fútbol femenino en la actualidad. Esta situación ha dejado una foto para la historia y que ha sido más que comentada en redes sociales: después del encuentro con la plantilla de la Selección femenina, tanto la princesa de Asturias como su hermana han posado con sendas camisetas oficiales de la Selección.
Mientras que la cara de Leonor correspondía a una expresión natural, la infanta Sofía no podía contener la alegría y el entusiasmo de estar en un ámbito que tanto disfruta, por lo que lució una sonrisa de oreja a oreja que se puede encontrar en todas las fotos capturadas durante la visita de las hijas de Felipe VI al vestuario de las jugadoras de la Roja.
Una de las primeras pistas de esta afición futbolera de la infanta Sofía, que parece únicamente compartir con su padre Felipe VI, fue obtenida durante el verano de 2020. En una de sus escasas apariciones públicas, la infanta presentó un aparatoso vendaje en una de sus rodillas y se veía obligada a desplazarse en muletas. Los medios de comunicación recibieron la noticia de que la infanta había sufrido un pequeño percance durante su estancia vacacional en el Palacio de Marivent, que había obligado al personal médico de la Casa Real a tomar esa drástica decisión. Sin embargo, el paso del tiempo aclararía la situación: en realidad, Sofía se había lesionado jugando al fútbol con sus primos Urdangarín, los hijos del matrimonio compuesto por el exjugador de balonmano y su tía Cristina de Borbón.
Sin embargo, esta lesión no era nueva para la infanta Sofía, que ya conoce de primera mano lo que significa jugar al fútbol al máximo nivel, puesto que milita en sus ratos libres en un club de fútbol femenino todavía desconocido por motivos de seguridad de la propia infanta y sus compañeras de vestuario. Lo que sí se conoce es su posición favorita en el terreno de juego, puesto que desempeña las funciones propias de un centrocampista, aunque todavía no se sabe si está más enfocada a la creación de juego o a la destrucción del mismo.