Por las calles cada vez se oye más la frase “ya no hay políticos como los de antes”, y a ese dicho no le falta razón. El Congreso estos últimos años ha sido lugar de numerosas trifulcas entre diputados de diferentes fuerzas políticas.
La famosa frase que pronunció Aznar pidiendo la dimisión del expresidente socialista, Felipe González, no fue bien recibida por los diputados del Partido Socialista.
El líder de la oposición de aquella época, José María Aznar, le exigía al presidente del Gobierno su dimisión por la corrupción de su partido.
Dos años después, Aznar se convirtió en presidente del Gobierno tras pasar un proceso electoral.
Menudo cambio
Han pasado 26 años de aquel acontecimiento y se nota. Viendo el momento en el que Aznar exige la dimisión del presidente andaluz los cambios más fáciles de notar son la forma de vestir de los diputados, y la gran cantidad de sillas que ocupan los diputados de los dos grandes partidos.
Hoy el panorama es muy diferente al de aquella época, ahora existen más de dos partidos nacionales con importante representación en el Congreso, ahora no todos los diputados visten con traje, y ahora el “Váyase señor González” se quedaría corto comparado con lo que se ha dicho en el hemiciclo.
Estos últimos años se ha visto de todo. En un debate electoral Sánchez acusó a Rajoy de ser una persona indecente, Gabriel Rufián en un pleno pronunció la irreverente frase hacia el presidente del Gobierno “saque sus sucias manos de Cataluña”, o la trifulca que se produjo en un pleno entre Josep Borrell y el separatista Rufián, que acabó con el diputado de ERC expulsado de la sala.