La ausencia del jugador merengue supone un duro golpe para la selección francesa, pero también para el propio atacante, que estará tres semanas de baja y que esperaba cerrar su etapa internacional en esta cita mundialista. Una enorme desilusión que ha acabado de un plumazo con el sueño del delantero galo.
Esta terrible situación ha hecho que Karim Benzema esté valorando levemente la posibilidad de extender su carrera más allá del 2024, lo que supone un doble problema para Florentino Pérez y Carlo Ancelotti, una intención del exjugador del Olympique de Lyon que hemos conocido en las últimas semanas.
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Si el galo decide extender su carrera pondrá en peligro la llegada de Erling Haaland al Bernabéu, algo que no gusta del todo a la directiva madridista dado que consideran que esa fecha es el momento perfecto para realizar el recambio en la delantera, además creen que a Benzema le queda dos años en el máximo nivel.
Sin embargo, la otra posibilidad, y que de momento es la más cercana, es que se retire en el año 2024, una fecha que podría ser clave para él, pero también para Kylian Mbappé. Ambos podrían cruzar sus caminos, pero no de la manera que todos los madridistas piensan.
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Tras el duro golpe de perderse el Mundial, a Benzema le han llegado multitud de mensajes, apoyos y comentarios. Incluso, a Karim se le ha llegado a sugerir que, para paliar este duro golpe, en el verano del año 2024, en el que incluso parecería tener decidido retirarse del fútbol profesional, pudiera disputar los Juegos Olímpicos con Francia.
Este evento es muy especial, ya que se disputará en París, en una ciudad en la que también estará el nacido en Bondy, obsesionado con esa cita en su tierra. Por tanto, habría bastantes opciones de que se reencontraran en la selección y así disputarían su último partido juntos.
Evidentemente aún queda mucho y esto no es más que una de las múltiples sugerencias que le han llegado a Karim Benzema en los últimos tiempos, pero tiene encima de la mesa esa posibilidad que le haría jugar su último partido como profesional con su país y con un jugador al que llegó a tener mucho cariño… hasta que le traicionó.
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Ahora, mientras tanto empieza la gran prueba de fuego para el delantero: demostrar que sigue siendo el jugador que lidera el proyecto y que puede serlo, al menos, una temporada más. Es evidente que su mente está puesta en estos momentos en poder recuperarse plenamente de sus molestias físicas y volver a sentirse jugador de fútbol.
Por ello, mira con optimismo al futuro y con la ilusión de hacer un segundo curso de la temporada a un nivel similar al que ofreció el año pasado a estas alturas. Su objetivo a día de hoy es pisar de nuevo el césped y hacer genialidades sobre el terreno de juego y encandilar a los madridistas.