El Vaticano ha emitido un comunicado en el que ha desmentido la información trasladada por el Gobierno de España acerca de los restos mortales de Francisco Franco.
La vicepresidenta, Carmen Calvo, aseguró que el secretario de Estado del Vaticano, Pietro Parolin, se había mostrado de acuerdo con el planteamiento del Ejecutivo de que los restos del dictador no acaben en La Almudena.
El Vaticano no ha tardado en desmentir al Gobierno a través de un comunicado en el que ha señalado que no se oponen a que los restos de Franco acaben en la Catedral madrileña.
"Le advertimos que la aplicación de la ley en nuestro caso se debe hacer en cualquier lugar del territorio y en este punto entendió que debíamos intentar, el Gobierno, obviamente, pero también la propia iglesia católica, una salida de ambas partes para que los restos de Franco estén en un lugar en condiciones de dignidad, pero en ningún lugar donde puedan ser objeto de ningún tipo de homenaje", señaló Calvo en declaraciones a los periodistas.
"Lo que acordamos fue estar de manera conjunta, tanto el Gobierno como la Iglesia, para encontrar una salida que obviamente no puede ser la Almudena", añadió Carmen Calvo.
La respuesta del Vaticano ha dejado en mal lugar al Gobierno. "El cardenal Pietro Parolin no se opone a la exhumación de Francisco Franco, si así lo han decidido las autoridades competentes, pero en ningún momento se pronunció sobre el lugar de la inhumación".
El Vaticano dio detalles de la reunión
"Es cierto que la señora Carmen Calvo expresó su preocupación por la posible sepultura en la catedral de la Almudena y su deseo de explorar otras alternativas, también a través del diálogo con la familia. Al Cardenal Secretario de Estado le pareció oportuna esta solución", ha explicado El Vaticano en el comunicado.
El Arzobispado de Madrid anunció, previamente, que no habían tenido contactos con el Gobierno para tratar este asunto y que la voluntad de la familia de Francisco Franco es enterrerarlo en la cripta de la Catedral de La Almudena.