El Gobierno de España, liderado por el socialista Pedro Sánchez, está estudiando subir las cotizaciones a los trabajadores para hacer frente al sistema de pensiones y que la generación conocida como 'baby boom' se asegure esta prestación cuando llegue a la edad de jubilación.
Según ha avanzado El País, el Ejecutivo socialista está manejando dos opciones para volver a llenar las arcas de las pensiones, un fondo que llegó a tener 67.000 millones de euros hace unos años y que actualmente se ha quedado con sólo 2.000 millones de euros.
Una opción que se maneja es la de subir un 0,5% las cotizaciones durante diez años a partir de 2023 mientras que la segunda vía consistiría en revisar las cuentas cada 3 años a partir de entonces y aplicar medidas correctoras si existen desviaciones para que el fondo crezca.
El Gobierno de España quiere vender este intento por reflotar el Fondo de Reserva de la Seguridad Social como un "mecanismo contingente y temporal" y no como una subida de las cotizaciones. Sin embargo, la realidad es que afectará al bolsillo de los españoles.
Para poder tener una pensión en el día de mañana, los españoles tendrán que rascarse el bolsillo en los próximos años. Los despilfarros del Gobierno socialcomunista los pagan los ciudadanos de a pie, que se verán afectados por la subida de las cotizaciones que estudia Pedro Sánchez y sus socios.
En los últimos años, han ido 'tirando' del dinero que estaba en el fondo de las pensiones para afrontar diferentes gastos. Ahora, en lugar de reponerlo para equilibrar las cuentas, se lo sacarán a todos los españoles que se levantan cada mañana para ganar un sueldo con el que mantener a su familia.
Pedro Sánchez tiene lo que se merece por vender su alma al 'diablo podemita'
Los despilfarros del Gobierno
El Gobierno de España, desde que Pedro Sánchez llegó a la Moncloa, han despilfarrado en cosas tan banales como una sesión de fotos al expresidente José Luis Rodríguez Zapatero. Las imágenes serán tomadas por el fotógrafo francés Pierre Gonnord y tendrán un coste de 38.500 euros.
Otros despilfarros de Sánchez y compañía son los vuelos excesivos y recurrentes con los aviones del Ejército del Aire. El líder socialista aprovecha cualquier oportunidad para subirse al Falcon y sus ministros tampoco se quedan cortos con estas aeronaves oficiales. Eso supone un elevado gasto que se podría evitar.
Además, el Gobierno de Pedro Sánchez duplicó los fondos públicos destinados a la compra de ‘snacks’, refrescos, vino y bebidas alcohólicas de alta graduación que se ofrecen a los pasajeros vip de los cinco aviones Falcon y los dos Airbus A310 del Grupo 45 del Ejército del Aire, las aeronaves reservadas a los miembros del Ejecutivo y la Casa Real para sus desplazamientos. Gastaron 40.000 euros para comer y beber en los aviones oficiales durante sus trayectos.