Tras la pandemia del coronavirus, España atraviesa, no sólo una brutal crisis social y sanitaria, sino también una profunda crisis económica; y es que miles de puestos de trabajo, así como medianas y pequeñas empresas, se han visto gravemente afectados por las medidas impuestas desde el Ejecutivo nacional para frennar la pandemia del Covid-19, siendo muchos los negocios y autónomos que han tenido que cerrar sus puertas de forma definitiva.
Una crisis económica que, sin embargo, no ha provocado que el Gobierno de coalición formado por el PSOE y Unidas Podemos haya dado ejemplo de solidaridad, rechazando congelarse el sueldo para el próximo año 2022, aprovechándose así socialistas y podemitas de la subida del 2% planeada para los funcionarios públicos.
Asi pues, este miércoles, en el Congreso de los Diputados, ambos socios de coalición se ponían de acuerdo para frenar la iniciativa de la oposición que proponía que el Gobierno no se beneficiara de la subida salarial de los funcionarios, siendo duramente criticados por PP y Ciudadanos.
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"Es inaceptable que el sueldo del Gobierno suba cuando una mayoría de españoles han visto rebajados sus ingresos familiares como consecuencia de la crisis económica" han criticado los populares; una idea subrayada por los de la formación naranja: "es del todo excesivo e incomprensible [...] en la situación económica actual de España y la presión que la crisis económica está suponiendo para los trabajadores, autónomos y empresas".
Contra la "asociación negativa" de los impuestos
Un aumento de los salarios de los funcionarios, y por ende de todo el equipo de Gobierno de Sánchez, que será costeada por las arcas públicas... y gracias a los impuestos de millones de españoles; unos impuestos que, tal y como ya ha planteado el Ejecutivo nacional, se verán incrementados el próximo 2022.
Incremento que se sumará a la subida de la factura de la luz, de la gasolina, y por ende, de todos los productos de primera necesidad, que ya están sufriendo todos los consumidores españoles, cada vez más ahogados económicamente.
Un ahogo que, sin embargo, el Gobierno de España parece no tener en consideración, poniendo ahora su foco de atención en luchar contra las empresas que realicen campañas publicitarias de descuentos con reducción del IVA: "Dias sin IVA" es uno de los slogan más conocidos y más utlizados por los comercios para promover las ventas, más aún, antes de la Navidad.
Un slogan que ahora quiere elminar el Ejecutivo nacional, que asegura que estos descuentos generan "una asociación negativa del impuesto en la mente del consumidor, como el causante del encarecimiento de los productos, en lugar de presentarlo como un instrumento imprescindible para el sostenimiento de los gastos públicos".
Premisa ante la que ya trabaja la Agencia Tributaria, investigando y prohibiendo este tipo de mensajes publicitarios, como reacción estatal al miedo a que los ciudadanos, cansados, comiencen a protestar ante los abusivos impuestos planteados por el Gobierno en 2022, que serán destinados a pagar, no sólo los sistemas públicos, sino también el nuevo sueldo de Sánchez y los suyos, el cual no hace más que beneficiarse de la brutal crisis económica que, sin embargo, ahoga cada vez más a los bolsillos de los ciudadanos.