José Rosiñol ha hablado alto y claro sobre los indultos a los golpistas catalanes en un artículo publicado en Vozpópuli. El primer presidente y miembro fundador de Sociedad Civil Catalana ha alzado la voz contra todas las mentiras que se están virtiendo sobre este asunto para blanquear una decisión que el Gobierno jamás debería tomar. El indulto refuerza al separatismo y la idea de una justicia represiva en España.
"El relato que intenta justificar ante la sociedad que se conceda la libertad a los condenados por el "prusés" solo pretende ocultar la respuesta a esta sencilla pregunta: si el gobierno Sánchez no necesitase el apoyo parlamentario del separatismo ¿se habría planteado siquiera conceder los indultos?", comienza su discurso.
En ese sentido, Rosiñol está convencido de que "el indulto solo logrará reforzar el relato de superioridad moral en el que siempre se ha basado el separatismo. No verlo así es no entender la realidad catalana, no saber el tipo de sustrato cultural catalán y volver a dejar de lado a los catalanes que sí queremos y creemos en la convivencia".
No entiende el presidente de SCC en qué se basa el Gobierno para establecer que la condena de los golpistas está siendo "demasiado larga": "Se aduce a que ya "llevan muchos años en prisión" y, por tanto, como ya son "muchos" es oportuno y "humano" conceder una medida de gracia excepcional (…) ¿En base a qué criterio un gobierno puede decidir cuándo una condena está siendo "demasiado larga"?".
Las excusas del Gobierno para indultar a los golpistas no se sostienen
Tampoco comprende aquello de que la encarcelación de los golpistas catalanes tenga algo que ver con la venganza y la revancha, como ha dicho el presidente del Gobierno: "En democracia la Justicia nunca es revancha o venganza, y menos en un sistema jurídico tan garantista como es el nuestro. (…) ¿qué tiene de revancha pedir el cumplimiento de la pena para unos condenados que reiteran una y otra vez que volverán a cometer el mismo delito en cuanto tengan (o les den) la ocasión?".
Por último, tampoco puede entender, como pasa a una amplia mayoría de ciudadanos, qué utilidad política tiene liberar a esos delincuentes: "Resulta que para recuperar la convivencia en Cataluña hay que conceder los indultos porque ello logrará acabar con el relato victimista del separatismo y así poder entablar un diálogo con los separatistas", duda Rosiñol, señalando que "el problema de la convivencia en Cataluña parte de los que la fracturaron y pretendieron crear dos comunidades en función de una ideología (los buenos y los malos catalanes".
Y remata: "Finalmente, los que creen que los indultos acabarán con el victimismo interpretan muy mal el escenario (algunos ingenuamente, otros interesadamente). En cuanto haya indultos, la maquinaria propagandística catalana (el noventa y mucho por ciento de los medios editados en Cataluña) lo venderán como un triunfo sin paliativos frente a un Estado con tintes autoritarios".
El primer acto de desobediencia del Govern: ni caso a la Selectividad en castellano
Una lectura que se ajusta objetivamente a la realidad que llevamos viendo muchos años en Cataluña. Lo demás es pura palabrería barata.