La fama de Pedro Sánchez como político deja bastante que desear. Sin embargo, desde antes de acceder a la carrera del servicio a los ciudadanos, ya era reconocido por sus extravagantes intervenciones en Twitter, como el mítico mensaje del restaurante Luna Rosa y la pizza "cojonuda" que se comió con sus "colegas" allá por 2010.
Lógicamente, con su ascenso en el Partido Socialista, su actividad en redes sociales comenzó a incrementarse lentamente hasta que llegó a la presidencia del Gobierno. En su legislatura como máximo mandatario del país, cosecha un fracaso detrás de otro, a pesar de que agradezca a Unidas Podemos en el actual debate del estado de la nación su colaboración en las "conquistas sociales" que se han conseguido con la formación morada como aliada.
Este Gobierno de bases y orígenes comunistas encabezado por Sánchez es un ejemplo perfecto de la torpeza de quien lo dirige. El líder socialista ese ha convertido en un famoso 'twittero' debido a sus salidas de tono y salvajes meteduras de pata que practica casi de manera diaria y habitual en esta red social. Una de ellas lo sitúa como una persona incapaz de contrastar información y cuyos valores feministas, que tanto dice proteger y tener en cuenta a la hora de gobernar, están hechos de paja y son, simplemente, otro truco de impostación para atraer votantes y mantener contentos a sus socios de Gobierno comunistas.
Como muestra de esta tendencia, un mensaje en Twitter del propio Pedro Sánchez que felicitaba a la Selección Femenina de fútbol sub-20 por su pase a la final en el Mundial que se celebraba en Japón en aquella época. Hasta ahí, el mensaje oficial era el correcto y el esperado por gran parte de la opinión pública y sus futuros socios comunistas de Gobierno. Sin embargo, Sánchez tenía que dejar su impronta personal y cometer un error que deslegitimara el mensaje que trataba de enviar.
Con el texto que felicitaba a las futbolistas, el hoy presidente del Gobierno adjuntó una imagen de la Selección Femenina, pero de las jugadoras de la categoría absoluta. En lugar de colocar una fotografía de grupo de las verdaderas receptoras del mensaje, Sánchez había sido incapaz de contrastar la información y preocuparse por encontrar una imagen adecuada y concordante con el mensaje que intentaba hacer llegar a través de Twitter.
Naturalmente, cientos de usuarios en esta red social se lanzaron a corregir y abochornar al líder socialista en público, criticando su falta de valores y el intento de apropiarse de una victoria colectiva de todos los españoles con un fin electoral. Asimismo, estos internautas le recordaron que la imagen que había colocado no correspondía, efectivamente, a la Seleción sub-20, sino que representaba a las jugadoras de la categoría absoluta del combinado nacional femenino.
Este no es el único ridículo de Sánchez. Además del ya mencionado 'tweet' de la pizzería Luna Rosa, local que todavía sigue en funcionamiento doce años después de aquel mítico mensaje del líder socialista, la hemeroteca de Internet siempre recordará el día en el que intentó aprovecharse de Las Trece Rosas con un fin electoral pero cometió el mismo error que con la Selección Femenina sub-20: colocar la imagen errónea.
Sánchez usó la imagen de la película que narra los acontecimientos de Las Trece Rosas, el grupo de mujeres que se opuso a la dictadura franquista y fue fusilado por esta razón varios meses después del final de la guerra civil. Muchos usuarios comentaron en la publicación que se había equivocado de foto, adjuntando la instantánea correcta. Incluso actores y otras personalidades de la cultura criticaron el "postureo" de Sánchez, como el mítico Félix Álvarez, conocido en su paso por la televisión de finales de los 90 y principios de los 2000 como 'Felisuco'.