El FC Barcelona ha vuelto a demostrar que lo de que solo piensan en deporte es una auténtica pantomima. Bartomeu, en un club vendido al independentismo, lo ha vuelto a hacer. ¡Menudo ridiculé!
El Barça se ha confirmado como un equipo huelguista. Algo que da a entender, en una jornada importante para Cataluña (21-F), que son unos sectarios del golpismo. Unos más. Apoyan la huelga y demuestran estar desconforme con lo que está sucediendo con los presos golpistas. Es bochornoso… (Los CDR cortan 13 tramos de carreteras e intentan colapsar Barcelona)
Pancartas y gritos aprobados
Bartomeu lo ha vuelto a hacer. Ha dado luz verde a una huelga, este jueves, y ha impedido que los suyos se entrenases en Sant Joan Despí. El presidente ya aprobó que saliesen pancartas en favor de los presos y tampoco silenció los cánticos desde las gradas. Siguen sin enterarse que el deporte no es política, parece.
Sevilla, en el horizonte
El Barça tiene una importante jornada por delante y se la ha pasado por el forro con la huelga por el independentismo. Los culés jugarán ante el Sevilla en el Ramón Sánchez Pizjuán, en el último partido antes de irse a Madrid a jugar en un doble duelo a cara de perro el doblete (Copa-Liga) contra los blancos.
Relajación
El calendario no admite relajaciones. Primero tienen Sevilla para dar un golpe sobre la mesa en Liga y aprovechar la ‘cagada’ del Madrid ante el Girona, y posteriormente ese doble duelo mencionado, a vistas también del Barça-Lyon de Champions en el que están obligados a marcar mínimo un gol para pasar a cuartos. ¡Que vayan haciendo política!