El lugar de taparse por la pérdida de su "honorabilidad", que saltó en mil pedazos por sus fraudes y los de su familia, Jordi Pujol todavía quiere dar lecciones a sus "súbditos" con un adoctrinamiento tardío que ya no convence a nadie. Al menos, lo ha intentado en un artículo de opinión publicado en La Vanguardia.
El hombre que 'pilló' a Jordi Pujol en 1981 ha dicho esto sobre su corrupción 40 años después
Midiendo muchos las palabras y jugando con la ambiguedad que siempre le ha caractirzado, el expresidente de la Generalitat Jordi Pujol ha advertido de un "retorno a la inseguridad" económica, social, cultural e identitaria que rompe el progreso que predominó en la segunda mitad del siglo XX, y algunos años del XXI.
Lo ha sostenido en el artículo 'Del derecho a decidir y de la voluntad de ser' publicado en 'La Vanguardia' coincidiendo con la redifusión de la conferencia 'Herder y Renan. Y el derecho a decidir' que el expresidente dio en 2014.
Al hilo de las tesis de esa conferencia, Pujol ha afirmado que Cataluña "tiene que disponer de un régimen político e institucional que le asegure capacidad de actuar con eficacia sobre su gente" para hacer frente a los retos actuales.
¡Jordi Pujol, la 'madre superiora' y sus hijos no eran más que una “organización criminal”!
Así, ha pedido asegurar su capacidad "de crear condiciones de buena convivencia" y de facilitar el desarrollo humano, colectivo e individual, en unos momentos en que las sociedades vuelven a estar en tensión tras décadas de mejora social y económica.
Ser "nación"
Ha mantenido que a lo largo de los siglos Cataluña ha experimentado una "persecución de elementos básicos" de identidad como la lengua y la cultura, y la memoria y determinadas formas de vida, además de políticas estatales de carácter unificador, según él.
"En nuestra casa la voluntad de ser ha sido también un factor básico de la Nación. Que Vicens Vives explicó muy bien. Y que la misma historia de Cataluña testifica", ha afirmado.
"Después de todo eso y de mucha inmigración --ya desde el siglo XVIII, y sobre todo XIX y XX (y ahora mismo)-- que se ha ido incorporando con beneficio general, es decir, de toda la sociedad catalana, Cataluña ha mantenido su personalidad", ha sostenido.
Cuando Jordi Pujol no era independentista: ¡¡Así defendía la permanencia de Cataluña en España!!
A partir de ahí, se ha expresado con fuerza y capacidad de propuesta positiva --ha mantenido--, "con reivindicación de un autogobierno consolidado y garantizado, e incluso últimamente con un voto independentista muy alto".
"Todo eso son temas que tener en cuenta ahora que hay y habrá polémica sobre conceptos como nacionalismo y patriotismo, identidad y cosmopolitismo, derecho a decidir y voluntad de ser. Y en este sentido sí que me ha parecido que mi conferencia sobre Herder y Renan de hace seis años tiene sentido, es interesante y puede ayudar a reflexionar", ha concluido.