¡¡El escándalo de la Feria de Ámsterdam!! ¿Ha echado el Procés al Mobile de Barcelona?

Ámsterdam celebra a partir de mañana un certamen similar al de Barcelona con presencia de firmas que han huido de la ciudad condal pese a que el riesgo de contagio del coronavirus es el mismo.

¡¡El escándalo de la Feria de Ámsterdam!! ¿Ha echado el Procés al Mobile de Barcelona?
¡¡El escándalo de la Feria de Ámsterdam!! ¿Ha echado el Procés al Mobile de Barcelona?

"Por el coronavirus no es". Lo ha dicho la vicepresidenta primera del Gobierno, Carmen Calvo buscando una explicación a la anulación del Mobile World Congress en Barcelona. Algo muy oscuro rodea a la cancelación del evento en Barcelona y ya han empezado a circular versiones: desde el rechazo a la situación política que se vive en la capital catalana hasta las represalias de la Administración Trump contra algunas medidas de la política de Pedro Sánchez en el gobierno de España. 

"Por el coronavirus no es"

Carmen Calvo insiste en que "la situación está controlada" en España refiriéndose al brote de coronavirus. "La cancelación de la feria no es por motivos sanitarios", ha dicho. Y en la misma dirección se ha expresado la vicepresidenta tercera y ministra de Asuntos Económicos y Trasformación Digital, Nadia Calviño: "Tenemos una salud pública excelente y los contagios que ha habido han sido tratados correctamente. No hay motivos. Hemos estado en constante contacto con los organizadores del Mobile y a su disposición para poner todos los medios para garantizar la seguridad. Veremos qué explicaciones dan".

Y la ministra de Industria, Comercio y Turismo, Reyes Maroto, ha defendido este jueves la gestión del Gobierno tras la cancelación del Mobile Word Congress (MWC) y ha instado a las empresas que decidieron no acudir a explicar esta decisión de por qué declinaron asistir a este evento y sí acuden a ferias similares en otros países.

Aquí es donde se ha producido la polémica. Por qué el coronavirus impide la organización de la feria de Barcelona y no la de otra parecida en Ámsterdam, a la que acuden las mismas firmas que han desertado de Barcelona. Parece claro que el coronavirus es la excusa, pero no la razón. 

La Tasa Google y la Tasa Tobin: la explicación política

Por un lado está la Tasa Google que defiende el gobierno de Pedro Sánchez, algo que ha rebotado a las empresas punteras norteamericanas y que podría estar detrás de su deserción de Barcelona. Al respecto Calviño ha dicho: "Es un impuesto para que las empresas que operan en el mundo real y en el mundo digital tributen por igual. Nosotros creemos que es una propuesta justa, adecuada y alinea nuestro sistema fiscal a la realidad del siglo XXI". Pero esa idea del gobierno no parece ser compartida por las grandes empresas tecnológicas norteamericanas.

Además de la Tasa Google, el gobierno tiene previsto aprobar en el Consejo de Ministros la Tasa Tobin, un impuesto para gravar las operaciones de conversión entre divisas que se producen al contado para penalizar la especulación monetaria en el corto plazo. Si un usuario compra acciones de empresas cotizadas con más de 1.000 millones de capital, cada operación de compra y venta le supondrá un carga añadida de 0,2%. 

Se trata de dos medidas polémicas que sitúan en el punto de mira internacional a la política económica del gobierno de España. Y en sectores próximos a la organización del Mobile se valoran como posibles causantes de la deserción masiva de Barcelona de las grandes empresas tecnológicas.

Y lo que más llama la atención es que empresas norteamericanas que han cancelado su presencia en Barcelona acudan a Ámsterdam sin problemas y sin miedo al coronavirus, lo que da pie a intepretar que es algo más que el pánico al contagio lo que ha causado la cancelación de la feria barcelonesa.

Otros certámenes en estos días en Ginebra, París, Madrid y Singapur

Mientras tanto, empresas como Sony, Intel o Cisco, que han huído de Barcelona, están presentes en una feria similar en Ámsterdam, el Integrated Systems Europe (ISE), que abre sus puertas mañana y que venía a ser como el aperitivo del gran encuentro en el Mobile World Congress de Barcelona pese a que el riesgo de contagio es el mismo en la ciudad holandesa que en la española.

La confusión rodea al tema. Ninguna de las empresas presentes en Ámsterdam y ausentes en Barcelona ha querido ofrecer explicaciones sobre su particular decisión. Y ha trascendido el estupor de muchos empleados de estas compañías, que interpretan que no hay diferencias en los riesgos del coronavirus entre Ámsterdam y Barcelona.

El clima de pánico generalizado que se ha producido en Barcelona no ha afectado en cambio a otros certámenes que se organizan estos días, como el del Salón del Motor de Ginebra, la Semana de la Moda de París, el evento internacional de arte ARCO en Madrid o la Feria Aeronáutica de Singapur.

El otro miedo: la inestabilidad política en Barcelona

La segunda razón de la fuga de Barcelona de los expositores que ya empieza a tomar cuerpo y que ya ha incendiado las redes sociales pasa por la inestabilidad política y ciudadana de Cataluña. Por los efectos devastadores del Tsunami Democràtic, por las imágenes de las barricadas y las hogueras que conviertieron meses atrás a Barcelona en la ciudad del horror, por las manifestaciones multitudinarias en favor de la sedición y por la inseguridad que producen las habituales huelgas de taxi y el transporte público.

La imagen de Barcelona, como capital de Cataluña, está por los suelos en todo el mundo y relacionada con la inseguridad. Por otro lado, que la alcaldesa de Barcelona sea capaz de publicitar una plataforma que pide frenar el 5G es también suficiente argumento para que los empresarios hagan las maletas y se vayan con la música a otra parte, un lugar, por ejemplo, como Ámsterdam en donde sean bien recibidos.

Algo huele a podrido en la cancelación del Mobile. Y como dice la ministra Calvo: "por el coronavirus no es".