El Real Madrid no para de recibir malas noticias que afecten a las arcas del club. Dicen que Ramos y Lucas Vázquez piden más dinero, que la negociación por Mbappé se complica… y ahora salta el colmo de los verdaderos colmos: Gareth Bale va a regresar al club en verano.
El galés ya le ha dicho al Real Madrid que el Tottenham no ejercerá la opción de compra, pase lo que pase hasta final de temporada, y que el 30 de junio del presente 2021 volverá a la entidad blanca.
Mourinho no quiere tener a Bale en sus filas y ha recapacitado, totalmente, en ese ideal que mantuvo afirmando que le quería fichar. Gareth no encaja en su proyecto y tendrá que buscar una nueva salida del Real Madrid en el mercado de fichajes.
El día de la marmota para Bale… el inacabable culebrón. Parecía que tenía la vida hecha en Londres, pero los spurs no lo quieren en su plantilla y lo devolverán a Valdebebas. La carrera de Gareth está más que finiquitada y en el Madrid no se piensan recuperarlo. Prefieren darle la carta de libertad y el finiquito.
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El Brexit, otro problema para Bale
Eso es un problema para el Real Madrid ya que Bale cobra 14 millones de euros por temporada y ese salario es el que tendrían que pagarle, por una temporada, para que dejase el club. Además, también por culpa del Brexit ocuparía plaza de extracomunitario en el Santiago Bernabéu y eso sí que es imposible.
Bale meterá al Real Madrid en un buen marrón, volviendo, y en Chamartín ya tenían suficiente con los que existen ahora mismo. ¿Quién será el que rescate a Gareth del ostracismo al que se verá abocado si vuelve al Real Madrid?
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