La familia Pujol ha denunciado ante la Policía Nacional el haber sido víctima de un 'operativo especial' del Ministerio de Interior, solicitando Jordi Puyol Ferrusola presentarse como acusación particular ante el caso Villarejo.
Así pues, el ex convergente y su familia, liderados por el primogénito del político, afirman que el gobierno de Mariano Rajoy orquestó , a través del grupo Cenyt propiedad de Villarejo, un operativo que allanó sus domicilios, les espiaron ilegalmente y llegaron incluso a robar "información sensible" de la familia.
"Sobre Jordi Pujol Ferrusola se practicaron multitud de seguimientos personales, se confeccionó documentación falsa, luego aportada por particulares a la Fiscalía Anticorrupción, y se dio cobertura con cargo a recursos públicos a distintos denunciantes espontáneos" afirma el documento presentado ante el juez Manuel García Castellón.
Así pues, el primogénito de los Pujol, encargado de la economía familiar en la última época, ha señalado que se produjeron al menos "tres intrusiones en el domicilio" de su ex esposa, con la intención de 'encontrar' documentación comprometedora del ex convergente. (La grave acusación de Jordi Sánchez hace saltar por los aires el mito de la unidad indepe)
Pujol incluso asegura que, tras los allanamientos, Policía Nacional, Guardia Civil y Mossos inspeccionaron a fondo la vivienda, y encontraron "huellas especiales" que los Pujol creen que podrían estar relacionadas con el caso Villarejo y los mandos policiales investigados en dicha causa.
Toman de ejemplo la 'Operación Kitchen'
Los Pujol, de esta manera, atribuyen toda la información que se tiene contra ellos a una "organización criminal"; la misma por la que está siendo investigado el comisario Villarejo.
No solo eso, sino que comparan esta organización con un operativo similar al de la operación Kitchen, según señala el diario El Mundo, en la que Interior dispuso abundantes medios para arrebatar información comprometedora oculta al ex tesorero del Partido Popular, Luis Bárcenas.
Y es que en el caso de Bárcenas, se han acreditado seguimientos ilegales a la familia del banquero, así como el robo e interceptación de teléfonos móviles o la entrada en las viviendas de Bárcenas, en busca de los documetos ocultos.