Hay quien dice que El Chiringuito es una familia, sobre todo aquellos que aún trabajan en el programa que dirige Josep Pedrerol. El presentador catalán no deja buen sabor de boca a muchos de sus colaboradores y las circunstancias en las que salió Pedro Sáez lo explican bien.
El joven ingeniero informático tuvo una irrupción en el programa difícilmente mejorable, ya que fue apareciendo cada vez con más asiduidad en el plató del programa. Su labor era analizar con datos las probabilidades en diferentes aspectos. Esto le valió para dar algún que otro zasca a los tertulianos.
Sus apariciones fueron muy bien recibidas y los clips de las mismas se reprodujeron por cientos de miles. Acaparó un protagonismo que al parecer no gustaba demasiado a Pedrerol quien quiere ser el líder del programa. El chaval no llegó para quitarle el puesto pero lo podría haber hecho perfectamente.
Al parecer daba más horas que un reloj y esto le hacía imposible compaginarlo con sus estudios, los cuales no había finalizado. Como él mismo explicó lo único que intentó fue reducir sus jornadas para poder estudiar y entonces le hicieron corralito. Es de esos que ahora dice que más que una familia el programa es una secta.
Y no es el primero ni el único que expresa esta sensación, famosas son las declaraciones de Siro López hacia el programa y más concretamente hacia Josep Pedrerol con el que todavía hoy día sigue sin hablarse por motivos evidentes. No parece que sea el último pues cada vez que sale uno la lía.
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