Los independentistas catalanes, encabezados por Quim Torra, han utilizado las últimas informaciones publicadas por Público para atacar al Gobierno español, y utilizar la muerte de más de 15 personas como propaganda golpista a nivel internacional.
Otros políticos afines, como Pablo Iglesias o Gabriel Rufián, se han sumado a las teorías conspiratorias de los catalanes respecto al 17-A, pidiendo explicaciones al Estado y tachando de "escándalo" la "relación con un terrorista"
El CNI está muy tranquilo
En la inteligencia española están tranquilos ante las acusaciones públicas realizadas por los golpistas y aliados esta semana. (¡¡La teoría de la conspiración por los atentados de Barcelona destroza desde dentro al Govern!!)
Recuerdan que, en marzo de 2018, el director del Centro durante los atentados, Félix Sanz Roldán, acudió al Congreso de los Diputados a explicar que Abdelbaki Es Satty, el cabecilla de los atentados, había sido confidente del CNI.
Durante estas declaraciones de Roldán, en la cámara se encontraba presente, entre otros, Irene Montero, la que parece haber sufrido un ataque de amnesia selectiva, dado que esta semana a acusado desde su formación a PP, PSOE y Ciudadanos de ocultar la información.
Control al yihadismo radical
Agentes de la Policía Nacional han afirmado a El Confidencial Digital que "todos los imanes en España tienen el teléfono pinchado por el CNI". Muchos de ellos, además, son colaboradores del Centro de Inteligencia, El hecho de que algunos tengan antecedentes penales es lo que les hace querer colaborar, tal y como hizo Es Satty. "No es algo extraordinario", afirman las fuentes policiales.
Desde los atentados de Madrid de 2011, se está realizando un control exhaustivo en las mezquitas, escuchando y evitando posibles núcleos radicales. "En las mezquitas se tienen infiltrados, y se vigila a cualquier imán o líder religioso que aproveche las reuniones de oración para reclutar a posibles radicales con fines delictivos".