El Clásico del 24 de octubre será el primer Clásico sin Leo Messi y Cristiano Ronaldo sobre el terreno de juego. El primero de los que están por venir... pese a que Florentino Pérez y Laporta se mueven, a su manera, para que el Clásico vuelva a tener una gran dimensión, pese a que no estén los dos grandes cracks.
Un Barça-Real Madrid siempre será un Clásico, esté quién esté, y siempre causará la máxima admiración de todo el planeta. Da igual los jugadores. Sin embargo, en 2022 promete ser un partido de mucha altura y que podría tener a Erling Braut Haaland como a uno de esos grandes protagonistas.
Haaland está en el radar de media Europa. El Barça, atado a su crisis, no puede ni llegar a hacerle sombra al Real Madrid. Florentino, en ese caso, es el que lleva la directa de las negociaciones y el encargado de fichar al gigantón futbolista noruego del Borussia Dortmund.
El Real Madrid jugará el Clásico con Vinicius Jr y con Rodrygo Goes, además de Karim Benzema, pero quiere tener próximamente a Haaland en su nómina de ataque. El nórdico, desde su casa, no le quitará ojo al gran partido y estará muy atento al duelo entre Vini y Ansu sobre el césped.
Haaland, todavía indeciso y sin confirmar su decisión a ningún club, mantiene que la Premier League ha dado un salto de calidad evidente y de categoría. El Madrid, ante el Barça, tendrá un test crucial. Una prueba de fuego para demostrar que hay proyecto, a la espera de que él y Mbappé lleguen al Bernabéu.
Un examen para demostrar que el proyecto funciona y que están llamados a liderar el fútbol español por muchos años más. Haaland lo verá desde su TV, sentado, y contemplará el encuentro en el que él podría estar la próxima temporada midiéndose a los azulgranas en el Camp Nou.
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Baile de dinero
Se espera que se mueva muchísimo dinero por Haaland y Raiola jugará todas sus bazas. Conviene, por tanto, demostrarlo con hechos. El dinero de la Premier lloverá sobre Haaland, Alf y el propio Mino, pero la palabra del jugador estará por encima de todo y será él el que decida su futuro.
Ese baile económico no estará en Madrid. Por ello, conviene enseñar las cartas que se tienen y el Camp Nou da una opción idílica para poder hacerlo. El gran partidazo del año, el escaparate para fichar a Haaland y confirmarlo en el próximo fichaje madridista.
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