¡El 'cerdito' Puigdemont enseña a sus hijas que la Policía española es el lobo feroz!

Marcela Topor, mujer de Carles Puigdemont, asegura que sus hijas tienen miedo de la Policía española: "Para ellas son el lobo feroz"... ¡Penoso!

¡El 'cerdito' Puigdemont enseña a sus hijas que la Policía española es el lobo feroz!
¡El 'cerdito' Puigdemont enseña a sus hijas que la Policía española es el lobo feroz!

Las hijas del fugado golpista Carles Puigdemont consideran que la Policía española es el “lobo feroz”, tal y como ha confesado su esposa, Marcela Topor, en una entrevista con el diario norteamericano The Sunday Long Read. ¡De traca! 

Cabe pensar que si la Policía Nacional es el lobo feroz, Puigdemont debe ser uno de los tres cerditos. Le viene como anillo al dedo. Aunque le sobran compañeros golpistas para ser considerados los otros dos cochinos del cuento… (¡¡Hasta la ciencia estudia la mala educación del redomado gilipollas Gabriel Rufián!!).

Las hijas de Puigdemont consideran a la policía el lobo feroz

El pasado domingo, el diario norteamericano en cuestión publicaba un reportaje sobre Cataluña basado en una entrevista a la mujer del líder golpista en el exilio. Marcela Topor habla en dicho reportaje sobre lo que ella considera “una persecución judicial” por parte del Estado al Gobierno “legítimo” de Cataluña.

En este sentido, Marcela Topor manifestaba que sus hijas Maria y Magalí, de 9 y 11 años respectivamente, consideran que su padre está mejor libre en Bélgica que encarcelado en España: “Entienden la situación”, explica Topor, que confiesa que las niñas ven a la policía española como “el lobo feroz”. (Quim Torra hace que España pague la manía persecutoria de Fuigdemont).

En el artículo, Topor justifica su permanencia en Cataluña por el hecho de que quiere que la vida de su hijas siga siendo lo más normal posible. Quizá su padre debió haberlo pensado antes de pasarse por el forro de los cojones las leyes españolas y de haber dejado tirados a sus compañeros.

Marcela Topor también se considera una víctima

Para rematarlo, la mujer de Puigdemont asegura haber sido víctima de ataques machistas y racistas por su condición de esposa del ex presidente catalán. Según lo ve ella, “hacen todo lo posible por desestabilizarle”. La realidad es que bastante inestable está ya por sí mismo, no hace falta echarle un cable.