Pakistán está de luto. Un padre habría matado a su hijo de tan solo 12 años con una de las peores excusas que se pueden poner: no quería hacer los deberes de la escuela. El individuo ya ha sido detenido y está siendo procesado por este horrible crimen que ha sacudido el país asiático por la brutalidad con la que se ha producido.
Todo comienza cuando el pequeño Shaheer Khan regresa a su casa después de un día de colegio. Su padre, Nazir Khan, estaba ya en el domicilio. Aunque tenía deberes y debía estudiar la lección para los días siguientes, Shaheer prefirió salir a la calle para jugar con su cometa. Fue en ese preciso instante cuando su padre se dio cuenta de lo que estaba haciendo y empezó a llamarle para preguntarle la lección.
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Sin embargo, el pequeño no se la sabía y comenzó a buscar excusas para evitar el castigo de su padre. La respuesta de su padre Nazir, lejos de ser una reprimenda clásica en la que se le confisca la cometa, fue lanzar líquido inflamable sobre su hijo. Al contacto con la piel de Shaheer, este líquido combustió y generó una importante llamarada que envolvió al pequeño de 12 años después de que Nazir prendiera fuego al líquido como castigo.
Los gritos de Shaheer alertaron a su madre, que llamó horrorizada al teléfono de Emergencias del país. Los sanitarios llegaron a tiempo para estabilizar a Shaheer, que ingresó en la Unidad de Cuidados Intensivos con pronóstico crítico. Sin embargo, el tiempo jugaba en contra del pequeño de 12 años, que había sufrido cientos de quemaduras en todo su cuerpo. Han sido esas mismas quemaduras las que finalmente han causado la muerte de Shaheer Khan.
Poco después del fallecimiento del pequeño en el hospital, su padre fue detenido en el acto como presunto culpable de estos macabros hechos. Nazir Khan se encuentra actualmente bajo custodia policial, donde está siendo interrogado acerca de este terrorífico suceso que ha helado la sangre de muchos paquistaníes. Ha explicado los motivos por los que quemó vivo a su hijo con detalle, y ha cooperado en todo momento con las autoridades: su verdadera intención era amedrentarle para que hiciera sus tareas, pero en ningún momento quería el desenlace que finalmente ha ocurrido.
Según sus palabras, el propio Nazir y su esposa intentaron apagar las llamas de la ropa de su hijo mientras llegaban las asistencias médicas de Emergencias, pero sin mucho éxito. De momento, Nazir Khan sigue bajo custodia policial a la espera de un juicio, mientras los investigadores debaten acerca de la intencionalidad de los actos del padre de Shaheer Khan.
Karachi, la ciudad en la que vivía la familia Khan, está completamente conmocionada. Nadie se esperaba este terrible suceso que tiene como culpable a Nazir Khan. El padre de Shaheer está, por el momento, a la espera de pasar a disposición judicial. Será el magistrado el encargado de decidir si Nazir Khan entra en prisión de forma provisional o queda en libertad con cargos.