El que manda en Can Barça es Messi, y el argentino quiere el regreso de Neymar a Barcelona.
Por este motivo, Neymar Jr. se ha convertido desde hace unos meses en objetivo prioritario de Bartomeu. (¡250.000 euros de multa! ¿Qué han hecho mal Sergio Ramos y Pilar Rubio?)
El delantero brasileño está cada día más cerca de cerrar su vuelta al Camp Nou, pero para sellar la operación Bartomeu necesita el ‘sí, quiero’ de varios jugadores culés.
Los 'sacrificados'
Como el Barça no tiene dinero, ha ofrecido a Coutinho (el Bayern no lo ha querido), Umtiti, Rakitic y Dembélé.
El brasileño, por el que el Bayern de Múnich no ha ejecutado la opción de compra, tiene ya pie y medio en Paris.
Umtiti y Rakitic también interesan al PSG, pero la pieza clave para hacer que Al-Khelaïfi ceda y traspase a Ney es Ousmane Dembélé.
La llamada de Tuchel a Dembélé
Thomas Tuchel y Dembélé ya coincidieron en el Borussia Dortmund, y el entrenador alemán le ha insistido al jeque para que acepte el trato por varios motivos.
A Tuchel no le importa perder a Neymar si a cambio tiene a Dembélé. Ousmane es más barato, por lo que el PSG pediría incluir también a otros jugadores; es mucho más joven que Ney; y es francés, lo que juega en favor del afrancesamiento que quiere imprimir a su plantilla el PSG.
De hecho, Tuchel ya habría llamado a Dembélé para convencerle.
En el PSG están seguros de que en París Dembélé no se lesionará, porque lo suyo es una cosa psicológica al no adaptarse a la vida de Barcelona.
Florentino se frota las manos
Al mismo tiempo, Al-Khelaïfi informa puntualmente a Florentino Pérez del avance de la negociación, tal y como acordaron.
Y el presidente del Real Madrid alucina porque el Barça no tiene dinero, se tendría que desprender de medio equipo para traer a Ney y sufrirá mucho para pagar las desorbitadas fichas de Messi y el brasileño.
Además, a sus 28 años, Neymar parece haber dado sus mejores años de fútbol, por lo que no vale, ni mucho menos, los 222 millones de euros que pide el PSG y que el Barça pretende pagar con tres o cuatro jugadores.
Por no hablar de la conducta de Ney fuera de los terrenos de juego, donde durante los últimos años ha protagonizado algunos de los escándalos más sonados del mundo del fútbol.