El Barça incorpora a una directiva "facha" (la primera que se llevó su empresa a Madrid)

El independentismo radical ruge porque Bartomeu ha dado cobijo en su junta a una empresaria traidora.

El Barça incorpora a una directiva "facha" (la primera que se llevó su empresa a Madrid)
El Barça incorpora a una directiva "facha" (la primera que se llevó su empresa a Madrid)

El independentismo está que trina contra el presidente del Barça, Josep Maria Bartomeu, y su junta directiva. No tiene suficiente obteniendo el permiso necesario para colocar estratégicas pancartas que nada tienen que ver con el deporte y sí con la política para externalizar el procés. El independentismo quiere más. Lo quiero todo del Barça.

Quiere utilizar el club a su antojo, como sucedía cuando Joan Laporta era el presidente. Bartomeu intenta nadar y guardar la ropa tratando de contentar a la mayoría. Pero no lo consigue. En el último partido disputado en el Camp Nou ante el Sevilla se desplegaron dos pancartas. En una podía leerse: "Libertad". En la otra "Solo las dictaduras encarcelan a los líderes políticos pacíficos. Libertad”. Y así vamos mientras Bartomeu no se atreve a cerrar las puertas de su club, privado, a los oscuros intereses del golpismo catalán.

La nueva directiva "facha" que fue la primera en llevarse su empresa fuera de Cataluña

Pero aún así, disponiendo del club más representativo de Cataluña para utilizarlo de forma partidista en favor de la minoría que impone su voluntad en el territorio catalán, los independentistas no están contentos con el colaboracionismo de Bartomeu. Y menos desde que ha incorporado a su junta directiva a Marta Plana, una empresaria que puede ser definida perfectamente como "facha", ya que en el ideario del independentista sólo los "fachas" podrían sacar a sus empresas de Cataluña para llevárselas a España. Marta Plana fue la primera que optó por llevarse a su empresa a Madrid en vista de los destrozos que el Procés estaba haciendo en Cataluña.

Entonces Plana justificó su pionera decisión alegando que "la inseguridad jurídica me ha llevado a dar este paso".

Y el sábado la asamblea de compromisarios del club adoptó el acuerdo de nombrar nuevos directivos a Josep Pont Amenós, Jordi Argemí Puig, Marta Plana Drópez y Juan Ramón Ramos Raich por 323 votos a favor, 121 en contra y 44 en blanco. Todo muy extraño, tratándose del Barça y de su especial sensibilidad hacia el independentismo, dado que parece que Bartomeu no ha tenido en cuenta que Plana es patrona  de la plataforma Juntos Sumamos, una fundación que pretende buscar la "concordia" dentro del clima de "tensión que se vive en Cataluña".

Marta Plana es fundadora de la empresa Digital Origin, que tiene el honor de ser la primera que se fue de Cataluña cuando el procés puso en riesgo su viabilidad futura. Plana se había presentado previamente como número 3 de la lista de Unió Democràtica en las elecciones de 2015, y fue sancionada e inhabilitada por cinco años para cualquier cargo público Su madre, que había sido dirigente de Unió Democrática de Cataluña, le dio de alta en la Seguridad Social de su empresa, aún sin trabajar allí, "para que siguiera cotizando" después de ser cesada y mientras cobraba una indemnización de 96.195,48 euros euros anuales durante dos años.

A favor del diálogo y la concordia

Licenciada en Derecho, Marta Plana ha residido en Madrid, trabajó en Florida con Bill Gates en Microsoft y su empresa prestó sus servicios a Google y Facebook en Sillicon Valley. Y consciente de la controversia que ha generado su nombramiento, ella misma se defendió ante los socios compromisarios del FC Barcelona en la asamblea: "Llevo el Barça en el corazón. Este club es más que un club y queremos ayudarle a crecer. No estoy en contra del derecho a decidir, estoy a favor del diálogo y de la concordia".

Justo cuando se puso en marcha la deriva independentista en Cataluña, Plana manifestó en Antena 3, al programa Espejo Público: "La fractura social, económica y jurídica que se está produciendo tiene consecuencias muy graves.  Este año entró un fondo de inversión holandés en mi empresa y dada la situación jurídica que se daba en Barcelona decidimos que por el bien de los 100 trabajadores y sus familias nos fuéramos a Madrid. Y lejos de solucionarse el tema, los parámetros se han radicalizado hacia las empresas y eso tiene consecuencias".

En el Círculo de Economía le planteó al entonces consejero Francesc Homs la situación de su empresa forzada a huir a Madrid y le preguntaba: "¿Podré volver?" Homs le respondió: "Y tanto, y quiero pensar que si se ha marcahdo tendrá más argumentos que los que me ha explicado aquí ahora. Debe haber otras razones porque la económica no me parece suficiente. Además, un cambio así exige costes económicos..."