El Barça recibe este domingo al Real Madrid y lo hará como siempre en un ambiente de gala. El Camp Nou se prepara para su mejor entrada de la temporada y todos los detalles ya están listos para la hora del partido.
El club anunció ayer a través de las redes sociales el mosaíco con el que tratará de intimidar a su gran rival y de paso motivar a los suyos. En esta ocasión, el Barça ha optado por una frase en inglés que no ha gustado a todos los sectores.
"We color football" (Nosotros coloreamos el fútbol) es lo que se podrá leer en las gradas del Camp Nou con un fondo azul por todo el estadio. Las pancartas serán reversibles, ya que una vez suene el himno, toda la parte azul se convertirá en los colores rojo y amarillo de la bandera catalana y se mantendra la mencionada frase.
Desde el sábado por la mañana, más de 24 horas antes del partido, los operarios del campo irán dejando las más de 90.000 cartulinas en sus respectivos asientos, para que todo el mundo pueda formar parte de una noche mágica.
Una tradición que empezó en 1992
Ya hace 26 años que el Barça desplegó su primer mosaico. Fue en la temporada 91-92 para recibir al Real Madrid, en un partido que acabó con empate a 1 y que ayudó al Barça a ser campeón de Liga.
En aquella ocasión, se repartieron unas 20.000 cartulinas y se podía leer el lema "Barça" en el Gol Norte. Desde entonces, han pasado más de 70 mosaicos por el Camp Nou en Clásicos, grandes partidos europeos o finales.
Ante el Madrid, algunos de los más emblemáticos han sido: "Força Tito" (Fuerza Tito), la camiseta con el número 12, "Som el Barça" (Somos el Barça) y "Som i Serem" (Somos y Seremos).