El Banco Santander envió una nota a algunos de sus clientes VIP tras celebrarse las elecciones y explicó que "la coalición entre PSOE y Ciudadanos probablemente complacería a los mercados financieros dado que la postura liberal de Ciudadanos sería mejor recibida que el populismo de Unidas Podemos".
La entidad financiera presidida por Ana Patricia Botín no quiere ni ver a Pablo Iglesias entrando en el Gobierno, quizás como vicepresidente de Pedro Sánchez. Es por ello que quiere que Unidas Podemos sufra un cordón sanitario. (Juan Manuel de Prada reprende a Vox por su "postureo patriótico")
El Santander, objetivo para Iglesias
Emilio Botín la noche antes de morir le contó a varios periodistas su preocupación por el crecimiento de Podemos. Tras su muerte, Pablo Iglesias arremetió contra su legado: "Respecto a la figura humana, en un día luctuoso como hoy, solamente puedo desear mi más sentido pésame a la familia".
Y añadía: "Ahora bien, después de escuchar a los dirigentes del PP deshacerse en elogios sobre la figura de Botín como hombre del poder, como uno de los hombres más ricos del país, tengo que decir que Botín ha representado el excesivo poder político y económico de los bancos en nuestro país que tienen mucho que ver con el desastre económico que ha producido muchísimo sufrimiento a los ciudadanos".
Iglesias tampoco se cortó contra su hija: "Será casta de la mala en el momento en que llame a un dirigente político para decirle lo que tiene que hacer". Hace unos días también llamó el voto contra la presidenta del Santander: "Es verdad que esos grandes propietarios tienen más poder que todos vosotros y vosotras, menos un día: el domingo. El domingo es un día extraño: ese día, el voto de cualquiera de vosotros y vosotras vale igual que el voto de Botín, vale igual que el voto de Florentino Pérez, vale igual que el voto de Villar Mir".