El 14 de julio de 2016, Francia sufrió un ataque terrorista de grandes dimensiones que acabó con la vida de 86 personas y que dejó a otras 400 heridas tras el atropello masivo con un camión de 16 toneladas.
El terrorista Mohamed Lahouaiej-Bouhlel, al volante del camión, pasó a gran velocidad por el lugar donde miles de personas estaban viendo los fuegos artificiales. Durante más de 2 minutos condujo por una zona plagada de personas.
Iker Jiménez da rienda suelta a las conspiraciones del 11-S: "¿Se puede hablar de atentado?"
En el paseo marítimo de la ciudad dejó 86 víctimas mortales, a las que arrollo con su camión. Asimismo, los servicios de emergencia notificaron 400 heridos que tuvieron que ser atendidos en el mismo lugar o en el hospital.
Entre los 86 fallecidos se encontraban 15 menores de edad y un bebé de dos años. La policía francesa, minutos después del atentado, abatió a tiros al terrorista, que tenía el camión propaganda yihadista.
Apoyo psicológico
Han pasado más de cinco años desde esos atentados y, según los profesionales sanitarios, se han incrementado las visitas a psicólogos desde ese fatídico día de 2016. Muchas personas que estuvieron presentes han necesitado este tipo de ayuda.
Todos los 14 de julio, a las 22:34 horas (el momento en el que se produjo el atentado terrorista) se hace un homenaje a las 86 víctimas que perdieron la vida a manos del terrorista Mohamed Lahouaiej-Bouhlel.