El abrazo de la vergüenza entre el independentismo catalán y el brazo político de ETA

El republicano ha asegurado que es el momento perfecto para conseguir "acuerdos" con el Gobierno de España.

El abrazo de la vergüenza entre el independentismo catalán y el brazo político de ETA
El abrazo de la vergüenza entre el independentismo catalán y el brazo político de ETA

San Sebastián ha acogido, este sábado, una manifestación en la que cientos de personas, principalmente representantes y afiliados de EH Bildu, han exigido el fin de la política penitenciaria "de excepción" para los presos de ETA.

Una reinvindicación que se produce pocos días después del décimo aniversario del fin de las acciones de la banda terrorista vasca, así como del discurso del líder de los herederos políticos de ETA, Arnaldo Otegi, que lamentaba públicamente "el dolor" provocado a las víctimas desde la banda terrorista.

"Paso a paso en el camino a casa" rezaba la pancarta, en euskera, que recogía el lema de la manifestación, demostrando que la principal reivindicacion del nacionalismo vasco, tras el acercamiento de los presos etarras a las cárceles del País Vasco, es la libertad de los presos de la banda terrorista.

Las causas judiciales ahogan a Podemos: pasan más tiempo en los juzgados que en el Congreso

Exigencia en la que EH Bildu no se encontraba solo: así pues, la manifestación era convocada por la red de apoyo a los presos de ETA, Sare, quien a su vez cuenta con el apoyo de PNV y Podemos. 

Pero no sólo los vascos tuvieron el apoyo de la formación morada, sino también de ERC, y con ellos, de todo el independentismo catalán, personándose en la manifestación el propio Oriol Junqueras, que no dudó en caminar al frente de la marcha junto a Arnaldo Otegi, e incluso, protagonizar más de un abrazo ante las cámaras.

Es el momento de los "acuerdos"

"Es un placer volve al País Vasco después de cuatro años de ausencia forzosa" ha asegurado Junqueras ante los medios de comunicación, haciendo una clara referencia a su condena por impulsar el procés.

Un reencuentro con el nacionalismo vasco que el republicano ha querido celebrar aplaudiendo el discurso de Otegi de la última semana, asi como valorar la declaración de 'paz' de ETA de hace diez años: "es valiente, sobre todo, en términos de expresar el dolor causado por la acción armada".

Del mismo modo, el líder de ERC ha querido vincular el futuro más cercano de  Bildu con el del nacionalismo catalán, asegurando que el País Vasco sigue actualmente "el camino por el que siempre ha apostado" Cataluña: "el camino del diálogo, de la negociación y el acuerdo para la resolución del conflicto político que tiene planteado la sociedad catalana con el Estado español, y también la sociedad vasca".

El Gobierno estudia cómo arruinar más a los españoles: que no les engañen, vamos a pagar por el uso de las autovías

Declaraciones que no sólo suponen una nueva 'hermandad' entre Bildu y ERC, sino que también supone una declaración de intenciones con respecto al Ejecutivo de Pedro Sánchez, que depende de los votos de ambos nacionalismos para continuar su legislatura, pudiendo significar este 'abrazo' entre radicales la creación de un nuevo grupo de presión hacia el presidente socialista.

Un grupo de presión que defiende la "democracia" y la "libertad", pero que, sin embargo, sigue sin condenar los atentados mortales provocados por los etarras durante décadas, así como que evitan condenar la violencia y el terror provocados por los radicales independentistas catalanes en los últimos años en las principales vías de la autonomía catalana.