La selección española logró la mayor gesta de su historia el 21 de diciembre de 1983. En el último partido de la fase de clasificación se impuso a Malta por un contundente 12-1 y logró el billete para Francia, lugar en el que fue subcampeona en 1984.
Holanda, que jugó 3 días antes su partido, era primera con 2 puntos de ventaja (en aquel momento por victoria se daban dos puntos en lugar de tres). En caso de empate, los neerlandeses se clasificarían si España empataba, perdía o ganaba por menos de 11 goles.
El partido contra Malta no pudo empezar peor ya que Señor falló un penalti en el minuto 2 de partido. Sin embargo, cuando se cumplió el primer cuarto de hora, Santillana adelantó al combinado nacional. Nueve minutos después, Malta empató y silenció al Benito Villamarín.
Antes del descanso, España volvió a adelantarse con otros dos goles de Santillana en el minuto 26 y en el minuto 29. Quedaban 45 minutos por delante y el combinado nacional tenía que marcar nueve goles para clasificarse para la Eurocopa de Francia.
España salió con decisión y los segundos 45 minutos fueron un auténtico monólogo. Los dobles de Rincón (minuto 47 y 57) y de Maceda (minuto 62 y 63) pusieron a España a cinco goles de conseguir la gesta con media hora de partido por delante.
Con el paso de los minutos, la selección española fue creyendo en la posibilidad de marcar 12 goles y los aficionados también se ilusionaron con la posibilidad de presenciar en directo la que sigue siendo, hasta el día de hoy, la mayor gesta del combinado nacional.
Locura con el gol de Señor
En el minuto 64, Rincón marcó el octavo para España que fue seguido del gol de Santillana en el minuto 66. A falta de 12 minutos para el final del partido, Rincón volvió a ver portería para marcar el 10-1, dejando a España al borde de la gesta con varios minutos por delante.
En el 80, Sarabia puso patas arriba al Benito Villamarín al marcar el 11-1 que dejaba a la selección española a un solo gol de clasificarse para la Eurocopa de Francia. La guinda la puso Señor, que con un poderoso disparo en el minuto 84 marcó el gol número 12 con el que España cerró el partido.
Al día siguiente, el 22 de diciembre de 1983, los periódicos se agotaron en los kioskos y el único tema de conversación que había era la goleada de España a Malta en el Benito Villamarín.