Dos años de la foto de Colón, PP y Vox están más separados que nunca

Los comicios catalanes demostrarán si la estrategia de Pablo Casado es acertada frente a Santiago Abascal.

07 de Febrero de 2021
Dos años de la foto de Colón, PP y Vox están más separados que nunca
Dos años de la foto de Colón, PP y Vox están más separados que nunca

Este miércoles, 10 de febrero la famosa 'foto de Colón' de Pablo Casado, Albert Rivera y Santiago Abascal en las calles más céntricas de Madrid cumplirá dos años.

Un momento, en 2019, que implicaba la unión de los tres partidos de la oposición contra las cesiones de Sánchez al independentismo catalán, pidiendo elecciones anticipadas para evitar que los socialistas siguieran con la 'mesa de negociación' con los independentistas.

Una alianza que luego fue trasladada a la estrategia electoral de Pablo Casado quien, en estas elecciones, abogó en su propaganda con la campaña 'España Suma', buscando una alianza de siglas que consiguiera alejar de la Moncloa a Pedro Sánchez y, sobre todo, a Pablo Iglesias.

La semana más dura de Irene Montero: entre tribunales y enfrentada a las feministas

Una estrategia que, sin embargo, fracasaba estrepitosamente, y que se convertía en el principio del fin de la estrategia conjunta de estos partidos con la llegada de Inés Arrimadas al liderazgo de Ciudadanos, y con los contínuos enfrentamientos entre el líder de los populares con el de Vox.

Enfrentamientos frecuentes que se han convertido en tensión entre ambas formaciones, que alcanzaba su punto álgido en la moción de censura al Gobierno planteada por Vox en el Congreso, y que recibia el rechazo frontal de los populares, con un discurso crítico y muy cargado de Casado contra Santiago Abascal, y que se ha visto continuada por la abstención de los de Vox al decreto del Gobierno sobre el reparto de los fondos europeos, entendida por el PP como una ayuda "salvavidas" de Abascal a Sánchez.

Las elecciones catalanas, la comprobación de la estrategia

A pesar de que ha sido la unión entre sus formaciones la que ha conseguido, junto a Ciudadanos, eliminar al PSOE de la presidencia en Andalucía, o mantener Madrid como bastión popular, ninguno de los partidos de derechas ha querido 'ceder' posiciones frente al otro de cara a los próximos comicios catalanes.

Así pues, tanto PP como Vox acuden de forma individual a estas elecciones, siendo esta cita con las urnas la comprobación de si la estrategia de ruptura con Vox de Pablo Casado supone un éxito o un fracaso en intención de votos a su partido en un territorio tan hostil como Cataluña.

"Esto no depende de Madrid": Illa promete bajar 45.971 euros el sueldo que tenía Torra

Y es que el líder de los populares se ha volcado en las elecciones catalanas con su candidato, Alejandro Fernández, a sabiendas de que un mal resultado podría debilitar a su formación a nivel nacional.

Por su parte, los de Santiago Abascal se juegan la entrada, por primera vez, en el Parlament catalán e incluso tener grupo parlamentario propio, teniendo como objetivo 'oculto' dar el sorpasso a los populares como propuesta de centro derecha en Cataluña.

Posiciones que distan mucho de la concordia que se respiraba en Colón hace dos años, y que demuestra que, una vez más, la situación del país, en recesión económica y pendiente de la evolución de la pandemia del Covid-19, pesa menos que el planteamiento electoralista de aquellos que planean Gobernar la nación.