Chris Grailey (29 años, Manchester) se sentía invencible.
“Fui el primero en decir que el coronavirus era todo mentira”, reconoce Grailey.
Nunca había tenido ninguna patología ni dolencia grave.
“Lo cogí en Tenerife pensando que era invencible, sin llevar una mascarilla. Pagué el precio", se sincera Grailey en un vídeo publicado por el ‘Manchester Evening News’.
"Dije que el coronavirus era mentira y ahora voy a morir"
Ahora Chris está en la UCI conectado a un respirador artificial para seguir con vida. No puede caminar.
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"Antes de ir a fiestas, mirad mi foto"
"Soy como un zombi. Estoy tomando cuatro antibióticos diferentes, esteroides, oxígeno todo el día y con más agujeros en mi brazo que un drogadicto. Esto es real, es la vida real matándome (...) Antes de pensar en ir a fiestas en casas, mirad mi foto e imaginaos que podríais ser vosotros”, confiesa Chris, antes negacionista, esperando que su mensaje cale en la sociedad y pueda concienciar a los que creen que el virus es un cuento chino.
"No tengo ningún problema de salud subyacente. No quiero que nadie cometa los mismos errores que yo”, advierte.
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"Perdí el gusto, el olfato, tuve sudores fríos. Pero se puso mucho peor cuando volví a casa”, explica.
“Ahora estoy en cuidados intensivos, esperando recibir más tratamiento, y sin saber si saldré del otro lado. Así que realmente quiero que se tenga en cuenta este mensaje porque le puede pasar a cualquiera, por favor, cuidaos", sentencia Chris desde su cama en el hospital.