Díaz Ayuso denuncia una campaña de acoso y derribo contra ella

"Ni estoy disfrutando de "una ganga" ni el empresario Kike Sarasola "ha hecho negocios con la Comunidad", ha dicho Díaz Ayuso defendiéndose de las críticas.

15 de Mayo de 2020
Díaz Ayuso denuncia una campaña de acoso y derribo contra ella
Díaz Ayuso denuncia una campaña de acoso y derribo contra ella

Algo tiene esta mujer que consigue revolver las tripas de la izquierda opositora. Isabel Díaz Ayuso, la presidenta de la Comunidad de Madrid, consigue concitar en su contra unanimidad en toda la oposición. Le tienen ganas. Sólo así puede entenderse la feroz campaña que se ha organizado en su contra.

No le perdonan una y hacen bueno aquello de "ladran, luego cabalgamos", una frase atribuida a Miguel de Cervantes que sin embargo salió del ingenio del poeta alemán Johann Wolfgang von Goethe.

Lo cierto es que la presidenta de la Comunidad, Isabel Díaz Ayuso, sufre una feroz campaña de acoso y derribo. Ella misma ha asegurado a través de Twitter que ni está disfrutando de "una ganga" ni el empresario Kike Sarasola "ha hecho negocios con la Comunidad" sino que todo responde a una campaña contra ella. "Así no hay desastre, hay un apartamento", ha resumido.

"Ni es una ganga ni Sarasola ha hecho negocios con la Comunidad"

Ayuso garantiza a través de las redes sociales que la oferta de Room Mate "es de la mejor calidad y son grandes profesionales" y explica, a renglón seguido, que Sarasola "donó de manera desinteresada muchísimo espacio para que Madrid pudiera sanar personas y cuidar a sus sanitarios". La presidenta autonómica lamenta que la campaña contra ella haya afectado también al empresario.

"No estoy en un apartamento de lujo. Ni son dos de 200 metros cuadrados ni es una ganga pues el hotel está cerrado. Ni el hotelero ha hecho negocios con la Comunidad", defiende Ayuso. Ve detrás de todo esto "una campaña para ocultar el desastre en el que han metido a España: así no hay desastre, hay un apartamento".

Parece evidente que el Gobierno de Pedro Sánchez trata de cebarse con los gobiernos autónomos no socialistas para tapar sus fiascos en la gestión del coronavirus. Y Madrid es plaza fuerte, una plaza perdida y que pica mucho verla en manos del PP.

Y han ido a saco a por Díaz Ayuso. Cualquier excusa vale. Le intentan encolomar los muertos, la culpan de los contagios por la fiesta de Ifema (los mismos que congregaron a 120.000 personas el 8-M en plena pandemia), le echan en cara que las becas comedor estén en manos de Telepizza y ahora han salido con lo del piso que ocupa en la Plaza de España de Madrid, un piso que paga ella de su bolsillo a diferencia de los que sucede con el "pisazo" que ocupa en el centro de Madrid la vicepresidenta Carmen Calvo y que pagan todos los españoles.

Ella lo tiene claro. La mejor defensa es un buen ataque y el gobierno socialcomunista de Sánchez ha optado por echarle la caballería encima para amortiguar las críticas que merece su gestión.