¡¡Desheredados!! Los malos hijos se quedan sin herencia por 'culpa' del coronavirus

Una pandemia mundial, cero visitas y ni una llamada. Esto es lo que han tenido que pasar miles de personas de avanzada edad que viven en residencias

26 de Octubre de 2020
¡¡Desheredados!! Los malos hijos se quedan sin herencia por 'culpa' del coronavirus
¡¡Desheredados!! Los malos hijos se quedan sin herencia por 'culpa' del coronavirus

Dicen que la sangre es más espesa que el agua, este sabio dicho significa que la familia y los lazos sanguíneos vienen antes que todo lo demás.

Condiciones que han traído como consecuencia un aumento de consultas para desheredar a hijos y nietos. Entre los meses de marzo y julio, la asociación de mayores de Fuenlabrada, ACUMAFU, recibió un total de 115 solicitudes para comenzar este trámite legal, mientras en el mismo periodo del año pasado solo tuvieron 48. Es decir, se ha incrementado un 239% aproximadamente.

La soledad es una de las causas para tomar esta decisión

Marcelo Cornellá, presidente de este colectivo ha concedido unas declaraciones al respecto: "Hemos detectado que con motivo de la pandemia hubo muchos mayores a quienes sus familiares no les asistieron, ni siquiera les llamaron por teléfono. Son ellos quienes han buscado nuestra asesoría legal".

Y añade: "Hablamos de los casos en los que los mayores se decidieron a empezar el proceso judicial. Porque si nos referimos tan solo a las llamadas que recibimos este número sube. Es más, podría decir que en toda España son cerca de 600.000 los interesados en desheredar, pero muchos ni siquiera dan el paso para informarse".

La ley, en la mayor parte de España, obliga a dejar al menos un tercio de la herencia a los hijos, lo que se conoce como “legítima”. Tan solo este caso quedaría exento si se verifica que los padres han sido agredidos físicamente por sus descendientes, no les han proporcionado comida cuando lo necesitaban o han sido maltratados psicológicamente. Sin embargo, para proceder a este proceso, la persona debe probarlo jurídicamente, y en el último caso, debe estar justificado por injurias, abandono o menosprecio. Para ello debe cumplir dos condiciones: que los hechos sean graves y que se puedan demostrar. Si todos los requisitos se cumplen, el progenitor podría emprender la desheredación.

Para poder dejar a los hijos sin el tercio de la herencia que les corresponde por la legítima, los testadores deben, en primer lugar, acreditar ante notario pruebas de que han vivido alguna de las cuatro excepciones que contempla el código civil, en su artículo 853, para dejar sin herencia a los descendientes:

Haberles negado el pan

Haberles agredido físicamente

Haber realizado actividades de carácter inmoral (prostitución, por ejemplo)

Haber cumplido condena en prisión

Estas causas, además, han sido reinterpretadas por el TS en los últimos años en diferentes sentencias que avalan también como circunstancia objetiva el maltrato psicológico.

Con este tipo de sentencias se espera evitar que existan hijos interesados en un fin económico sin necesidad de corresponder a las obligaciones que tienen sus hijos hacia sus padres. Un magistrado del Supremo utilizó un caso de dos jóvenes madrileños que llevaban 10 años sin visitar a su padre, para sentar jurisprudencia y que de este modo no recibieran herencia.

Ahora, una nueva sentencia cuestiona si los hijos que tienen un comportamiento equivoco hacia sus padres tengan derecho a sus pensiones y a su herencia. La sentencia se dictaminó al considerar impropio que subsista la pensión enriqueciéndose injustamente a costa del padre.

Las dificultades para probar las causas de la desherencia y los trámites necesarios para acreditarlo provocan que en muchas ocasiones se trate de un proceso legal demasiado complejo. De hecho, según los cálculos de ACUMAFU, sólo un 18% de las personas interesadas en desheredar a sus descendientes lo acaba logrando.

"Al ver que a veces es complicado desheredar por completo a sus hijos, algunas personas terminan decidiendo fundirse todo su dinero para no tener nada que dejarles a sus descendientes. Otros se mudan a País Vasco o Navarra y se empadronan para estar seguros de que haciendo el testamento allí sus hijos no se quedan ni con la legítima", reconoce el presidente de ACUMAFU.