Rocío Carrasco sufrió dos ataques de ansiedad durante la grabación de la serie documental, el más duro durante su relato de la agresión a manos de su hija
Socialité desnudó este sábado algunos de los principales secretos de la grabación de la serie documental de Rocío Carrasco, entre ellos los dos cuadros de ansiedad que sufrió la protagonista durante las grabaciones.
Fueron duras jornadas para Rociíto, que lo pasó realmente mal sobre todo al contar el episodio de la agresión de su hija, Rocío Flores. El programa de María Patiño asegura que estas crisis de ansiedad "llegaron a poner en peligro la grabación".
Se hizo hincapié especialmente en ese ataque de ansiedad el día en que contó la paliza de su hija: "Una de las terribles crisis de ansiedad que sufre Rocío Carrasco se produce durante el relato de la brutal paliza que recibe por parte de su hija Rocío Flores".
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"Revivir la violenta agresión de su hija y los hechos posteriores impacta emocionalmente a Rocío Carrasco hasta tal punto que comienza a faltarle la respiración. Sus pulsaciones se aceleran, Rocío Carrasco se rompe y pierde el control de sus emociones, está sufriendo una crisis de ansiedad, el equipo del programa se asusta y la dirección decide parar la grabación (...) Rocío no puede respirar", relató el programa.
Rocío Carrasco no quiso parar la grabación
A pesar de todo, y pese al susto que sufrió Fidel Albiac, finalmente siguió la grabación: "La cara de Fidel está desencajada y se pone nervioso al ver lo que está sucediendo, con su ayuda Rocío Carrasco se tranquiliza y consigue recuperar la normalidad poco a poco".
"La dirección del programa habla con Rocío y le sugiere que la grabación termine por hoy, han tocado un tema muy delicado, pero Rocío se recompone y pide que la grabación continúe", concluye Socialité.
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Fueron cuatro semanas de grabaciones diarias, durante 10 horas, de 9:00 de la mañana a 19:00 de la tarde parando únicamente para comer. Un mes en el que Rocío Carrasco se puso en el espejo de su tragedia personal.
Rocío Carrasco ha sufrido muchísimos problemas psicológicos debido a lo sucedido con su hija aquel día 27 de julio de 2012, casi tantos como los ocasionados por su relación con Antonio David, pero por fin empieza a ver la luz al final del túnel.