¡¡David Fernández de la CUP, queriendo sembrar la paz, definió con exactitud los 'actos de sedición' que sucedieron!!

Llega el turno de las defensas en el juicio contra el 'procés' y aunque tratan de poner paz de por medio, consiguen cosechar la 'sedición'

27 de Abril de 2019
¡¡David Fernández de la CUP, queriendo sembrar la paz, definió con exactitud los 'actos de sedición' que sucedieron!!
¡¡David Fernández de la CUP, queriendo sembrar la paz, definió con exactitud los 'actos de sedición' que sucedieron!!

La jornada 36 del juicio contra el 'procés' estuvo marcado por una cosa: el turno de las defensas. ("¡Esto es un insulto al tribunal!" Las defensas convierten el juicio en un cachondeo y Marchena debe intervenir).

Así pues, éstas conducen el interrogatorio a los testigos que ellas mismas solicitaron, a pesar de que los testimonios transcurrieron por terrenos pantanosos.

Un camino que tenía como punto de partida la paz y la desobediencia civil, acabó conduciendo involuntariamente a la sedición.

Uno de los testigos que produjo la contradicción más clara y evidente fue el exdiputado de la CUP, David Fernández, quien describió lo que sucedió durante el 1-O. (¡¡Han perdido el juicio!! ¡¡Los podemitas catalanes quieren ilegalizar el PP!!).

La visión de David Fernández

Desde su visión, aquello respondía a una resistencia pasiva generada por la percepción popular de que se les imponía una ley injusta. Dijo que la gente acudió a los centros de votación para "resistir" y que lo hizo mediante "muros" o "murallas humanas".

También afirmó que el objetivo era tratar de impedir que los que sí cumplían la ley ejecutaran un mandato judicial: intervenir las urnas y cerrar los locales. (Oído en el juicio: "La tensión nos impidió evitar los daños a los vehículos policiales").

Esta actuación, casi surgida por generación espontánea, no obedecía, sin embargo, a una "estrategia de planificación violenta". Pese a los "llamamientos permanentes a la acción pacífica" ('pau', paz, 'peace') hubo momentos de tensión.

"Es obvio que ocurrieron muchas cosas, pero eso es centrarse en lo accesorio", dijo. Porque lo que reinaba era la paz. O cualquier otra expresión que sirva como sinónimo: "ambiente festivo", "serena indignación", "cordialidad"...

El problema de este postulado, que no fue exclusivo de Fernández dado que también lo defendieron otros, como los miembros de ERC presentes el 20-S Jordi Orobig y Bernat Picornell, es que las acusaciones no lo interpretaron igual.

La descripción coincide, casi punto por punto, con la redacción de lo que en el Código Penal es un delito de sedición. "Son reos de sedición los que, sin estar comprendidos en el delito de rebelión, se alcen pública y tumultuariamente para impedir, por la fuerza o fuera de las vías legales, la aplicación de las Leyes o a cualquier autoridad, corporación oficial o funcionario público, el legítimo ejercicio de sus funciones o el cumplimiento de sus acuerdos, o de las resoluciones administrativas o judiciales".

La Fiscalía lo vio. La Abogacía del Estado también. Y a partir de ahí, empezó el 'espectáculo'.(¡¡Un policía le quita la 'careta' al abogado de Junqueras en el juicio contra los golpistas del 1-O!!).

Rosa María Seoane llegó incluso a preguntarle al de la CUP por su concepción de la "fuerza". "¿No hubo violencia pero se empleó fuerza?", dijo. ¡Retratados!