Cuixart provoca al juez Marchena con insultos

Ha escogido el peor momento para publicar un libro con valoraciones personales sobre el juicio al 1-O

09 de Julio de 2019
Cuixart provoca al juez Marchena con insultos
Cuixart provoca al juez Marchena con insultos

Una vez acaba la vista oral del juicio al procés y a la espera de la sentencia, el intelectual y presidente de Òmnium Cultural, Jordi Cuixart, no se le ha ocurrido otra cosa que publicar su libro donde insulta directamente al juez Marchena.

Digno de su ADN catalán supremacista y de raza superior, el muy inteligente tacha de autoritario o injusto, entre otros, a la persona que decidirá si permanecerá en la cárcel los próximos 25 años de vida. 

Las neuronas le han abandonado en el peor momento

El golpista ha publicado un libro titulado “Lo volveremos a hacer. Cuando la injusticia es la ley, la desobediencia civil es un derecho". No ha tenido suficiente con ser acusado de rebelión por arengar a las masas y acorralar a 15 agentes de la Guardia Civil y una secretaria judicial durante horas, que ahora llama a la desobediencia desde la propia portada.

Sus ganas de provocar al juez Manuel Marchena puede acarrear consecuencias. No sólo le está juzgando a él, hay otras 11 personas a la espera de la sentencia, y seguramente no les habrá hecho ninguna gracia.

Hipocresía reiterada entre los líderes de la república fantasma

"La actitud autoritaria del presidente de la Sala, Manuel Marchena, con reiteradas decisiones unilaterales, muy lejos de velar por la celebración de un juicio justo, ha acabado controlando por la puerta de delante lo que el PP pretendía controlar por la puerta de atrás" se puede leer en su libro. Parece mentira que Cuixart tache de “decisiones unilaterales” después de la declaración de independencia de su amigo y fugado Puigdemont.

El panfleto catanazi de tapa blanda al más puro estilo del libro prohibido del Mein Kampf de Hitler, se puede adquirir por menos de 10 euros. Cuixart pasa ahora de acusado a acusador.

Un juicio totalmente ejemplar de carácter público

Los intentos de todos los enjuiciados de impugnar el juicio por falta de garantías ha sido un absoluto fracaso. El juicio ha sido televisado y seguido por miles de personas desde el primer momento y se ha podido apreciar la ejemplaridad de la sala segunda.

Queriendo hacer alegaciones al franquismo, con toda la bilis en la boca, Cuixart escribe: "el Supremo, la misma Sala en la que se juzgó al presidente Companys en mayo de 1935, se ha convertido ahora en un consejo de excepción democrática, en el que los derechos fundamentales y el pluralismo democrático han sido perseguidos penalmente por jueces militantes en defensa de la unidad de España".

Intento absurdo de desacreditar las decisiones del juez

Como es de esperar, ataca al Estado una y otra vez intentando hacer creer que ha sido un juicio político. Cree que Marchena vulneró el derecho a la defensa al cortar la declaración de una testigo que estaba emitiendo valoraciones personales. Una testigo, por cierto, que estaba leyendo un guión en sus respuestas a los abogados de la defensa.

Entre sus líneas, Cuixart reparte palos para todos. Partido Popular, Pedro Sánchez y su PSOE junto a los indultos, la Abogacía del Estado, Vox… Absolutamente todos salen escaldados.