Si algo ha demostrado Rocío Flores durante toda su participación en Supervivientes 2020 es su espontaneidad y su sentido del humor.
Y la última semana del programa no iba a ser menos. Los concursantes que aún permanecían esta semana en la isla han continuado con sus tareas, ya habituales en el reality.
Entre estas tareas, está la del reparto de caracolas; sin embargo, en esta ocasión, esta 'sencilla' tarea ha provocado un momento cómico de lo más inesperado, tanto para los supervivientes como para la audiencia.
Y es que Rocío Flores, encargada de repartir las caracolas entre los integrantes del grupo, se ha 'hecho un lío' con las tablas de multiplicación... y la tarea se le ha complicado hasta el punto de necesitar ayuda.
"¿Cuánto es cuatro por cuatro?"
Tras hacer el recuento de las caracolas que se habian conseguido, 19, Rocío Flores se ponía manos a la obra para repartirlas entre los integrantes del grupo.
Y ahí aparecía el problema: "19 entre cuatro... cuatro por cuatro... ¿cuatro por cuatro?"
Las matemáticas básicas parecían atravesarse en la cabeza de la hija de Antonio David, que recurría a Ana María Aldón, que le daba la respuesta: "Dieciséis". (Sofía Suescun desafía a la censura en la ducha como Dios la trajo al mundo)
Ante el momento vergonzoso, Flores tiraba de sentido del humor : "Uy, a mí me van a matar en España, mi padre me va a arruinar la vida".