Desde que cumplió 18 años en 1991, Santiago Vila Vicente ha sido un político nacionalista. Primero en Figueras, y finalmente como consejero separatista de Territorio, Cultura y Empresa entre 2012 y 2017.
De las pocas veces en las que Vila fue realista fue cuando en 2016 se le escapó que “solo hay un 20% de catalanes favorables a la independencia”.
También es cierto que un día antes de dar el golpe de Estado en Cataluña a Santi Vila le entró el canguelo y abandonó su cargo, pero era demasiado tarde.
Su tardía retirada no le sirvió para evitar la cárcel ni para ser juzgado por rebelión, sedición y malversación por el Tribunal Supremo en el juicio al procés.
Santi Vila: “Y si tenemos que ir unos días a la cárcel, iremos"
En febrero de 2018, cuando se olía que podía terminar entre barrotes, acusó de “tiranos” y totalitarios a sus antiguos compañeros de Govern, pero el daño a Cataluña ya estaba hecho.
Y es que en verano de 2017, Santi Vila hizo un discurso para pedir la participación popular en el golpe de Estado.
Un discurso, tal y como podéis apreciar en el vídeo a continuación, en el que Vila aseguraba lo siguiente:
“Y si la semana que viene tenemos que ir unos días a la cárcel, iremos. Y si nos tenemos que jugar el patrimonio, nos lo jugaremos. Y si tenemos que acabar en la cárcel, acabaremos. Porque nos va la dignidad personal y colectiva. La dignidad de esta nació, una nació que jamás los aspanyols nos dirán que existe. Porque esto es preexistente”
El mismo tipejo, cuando declaró el pasado 21 de febrero en el Supremo, dijo: “No se me ocurre qué podía haber hecho para evitar el referéndum. Lo que ha pasado en Catalunya es impropio de una sociedad moderna y avanzada como la sociedad catalana. Teníamos que haber hecho las cosas muy distintas. Para mí no era un referéndum, era una gran movilización política”.
¿Cómo se puede ser tan hipócrita, Santi? ¿Cómo puedes movilizar a las masas para que participen en un golpe de Estado y después, en tu juicio, decir lo opuesto?