
El novio de Miguel Frigenti toma medidas tras su descarado tonteo con Óscar Landa
A Nua no le ha gustado nada lo que su novio y Óscar Landa se traen entre manos
La casa de Gran Hermano Dúo es un hervidero de emociones. Sentimientos que suben y bajan como una montaña rusa. Y en el centro de todo, Miguel Frigenti y Óscar Landa.
Desde el primer día, su conexión fue evidente. Parecen almas gemelas. Comparten una personalidad similar y su química es innegable. Lo que comenzó como una amistad, parece estar cocinándose a fuego lento.
Óscar, sin embargo, tiene el corazón dividido. Aunque destaca el físico de Alex Ghitta, confiesa que la actitud de Miguel le atrae mucho. Esta dinámica no ha pasado desapercibida para Nua, el novio de Frigenti desde hace siete años.
Su novio, muy celoso ante su comportamiento
Nua no oculta sus sentimientos. Durante la gala 5 del programa fue claro:
"A día de hoy sigo siendo el novio de Miguel, que yo sepa", comentó, dejando ver su incomodidad. Ver abrazos, caricias y bromas entre Miguel y Óscar no es fácil para él.
El punto más polémico llegó durante una fiesta. Un "pico" entre Miguel y Óscar desató comentarios. Ambos lo minimizaron entre risas: "Hastag muac ha sido un error". Pero para Nua, la situación va más allá de un simple descuido.
"Verlos así me incomoda", confesó. Sobre todo, al presenciar momentos más íntimos, como cosquillas en la cama o juegos en el salón. "Veo química", admitió, aunque también aseguró que confía en su relación.

Mientras Nua lidiaba con sus inseguridades, Miguel aprovechó el programa para dejar claro lo que siente. Antes del debate, expresó su amor de forma contundente:
"Yo mientras tenga a mi novio respiro tranquilo. Él lo es todo para mí. Me veo envejeciendo con él. Solo espero morirme antes que él porque no podría vivir sin él".
Además, tras las nominaciones, volvió a dedicarle unas palabras. "Un besito a mi novio, que le quiero muchísimo y que ya me conoce", afirmó con cariño.
¿Amor en la casa o simple amistad?
La relación entre Miguel y Óscar sigue dando que hablar. Para muchos, es un reflejo de lo que puede surgir en un encierro donde las emociones están a flor de piel.
Mientras tanto, Nua sigue observando desde fuera. Entre el amor incondicional que siente por Miguel y el temor de que algo pueda cambiar.
La casa de Gran Hermano Dúo no deja de ser un escenario donde el amor, la amistad y la lealtad se ponen a prueba. Y el desenlace, como siempre, está en manos del tiempo.
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