Más agonía para Anabel: este es el tiempo que la justicia alargará la causa de su hija

Anabel Pantoja atraviesa uno de los momentos más duros de su vida. El 31 de enero, desde su casa en Gran Canaria, compartió un vídeo desgarrador. En él, con el semblante cansado y triste, se defendió de las acusaciones de maltrato infantil. Su hija estuvo ingresada desde el 10 de enero en el Hospital Materno Infantil de Gran Canaria. Ahora, a la angustia vivida, se suma un proceso judicial que podría extenderse seis meses.

"Esto es una pesadilla, pero confiamos en la justicia", dijo Anabel. Aunque ya tiene a su pequeña en casa, el proceso no ha terminado. Médicos, asistentes sociales y testigos declararán en los próximos meses. Al final, el juez decidirá si archiva el caso o si inicia una causa judicial.

Todo comenzó el 9 de enero. Ese día, la bebé sufrió un episodio de crisis. Anabel y su pareja, David, decidieron llevarla al hospital. La preocupación era inmensa. Finalmente, el 20 de enero, anunciaron una mejoría: "Nuestra hija está bien. Seguimos adelante". El 24 de enero la pequeña salió de la UCI. Tres días después, finalmente, regresaron a casa.

Un proceso judicial largo y doloroso

Lo que pocos sabían era que, el mismo día que su hija recibió el alta, Anabel y David comparecieron ante el juez.  Un parte de lesiones activó la investigación el 17 de enero. El 21 se iniciaron las diligencias previas. El 27, ambos declararon como investigados por un presunto delito de lesiones imprudentes. En su testimonio, negaron haber causado daño alguno a su hija.

Con la voz rota, Anabel recordó su declaración:  "Contamos nuestra verdad. Lo único que hemos hecho es amar, cuidar y proteger a nuestra hija". Aseguró que muchos padres han vivido situaciones similares. "Es un bache, una situación injusta", añadió.

El 27 de enero, por la noche, anunció que su hija había recibido el alta: "Hemos vuelto a casa. Ahora nos toca volver a vivir. Hace 18 días volvimos a nacer los tres".

Los próximos meses serán determinantes. La investigación continuará mientras Anabel y David intentan recuperar la tranquilidad. Durante al menos 6 meses la causa podría prolongarse.  "Vamos a contarle al juez lo que ha ocurrido para que quede todo claro", aseguró.  La batalla aún no ha terminado, pero su esperanza sigue intacta.