Carmen Borrego tiene que tragarse los ataques de Joaquín Prat por el 'cara a cara'

El culebrón de la familia Campos no parece tener fin. El último episodio fue el ‘cara a cara’, o mejor dicho, el ‘pantalla a pantalla’ en ‘¡De Viernes!’ entre Carmen Borrego y su hijo, José María Almoguera. Desde entonces, son muchas las voces que comienzan a estar cansados de la situación.

Muestra de ello son los comentarios que ha tenido que soportar Carmen Borrego de sus compañeros de programa en ‘Vamos a Ver’. Joaquín Prat  y el resto de contertulios no han tenido reparo en criticar la aparición de Carmen y su hijo, sobre todo tras desvelarse que ambos se abrazaron tras las cámaras.

Ese gesto no ha sido bien entendido por Joaquín Prat y así se lo ha recriminado a Carmen en el programa. La hija de María Teresa Campos intentó justificarse,  “A lo mejor el encuentro hubiera sido de distinta manera si no hubiera personas con móviles intentando grabar”. Y añadía, “Si dije que iba a ser en privado, iba a ser en privado. A lo mejor fue más frío porque nos estaban grabando y no quise que se grabara”. Unas palabras que  terminaron por hacer explotar al presentador.

Carmen acaba agachando la cabeza en su propio programa

“¿Pero tú no te das cuenta que todo esto no es normal?”, empezaba diciendo Prat. “Sin embargo, televisáis esa parte en la que estáis los dos a media pantalla partida, teniendo un diálogo... Pero si es que, ¿Cómo no tenéis esos diálogos en privado y vais a programas de televisión?”. Y terminó con un contundente, “Te digo con todo el respeto del mundo que yo alucino”.

La hermana de Terelu volvió a insistir en que ella quería que fuera en privado, dejando caer que era cosa de su hijo. “Entonces lo hacéis por dinero porque él quiere. Tú tienes una obligación contractual. Él solo se quiere reconciliar con su madre si hay cheque de por medio”, finalizó Prat. Un ataque en el que también ha participado Alessandro Lequio, “Si dices que tienes la obligación contractual y luego te abrazas detrás de las cámaras, como mínimo sería un engaño a la audiencia”.

Ante tantos dardos de sus propios compañeros, a Carmen poco más que le ha quedado agachar la cabeza y aguantar su vela. “Cuando uno se expone, tiene que aguantar el chaparrón y las opiniones. Yo no puedo ir en contra de las opiniones de cada uno de vosotros”, aseguró.