Amador Mohedano reaparece sin filtro contra su sobrina Rocío Carrasco: “No quiero ni…”

Esta semana en ‘¡De viernes!’ acudía un invitado especial. Hacía mucho tiempo que Amador Mohedano no iba a ningún plató y ha regresado para hablar de su relación con Rosa Benito.

Aunque pasó lo inevitable y decidió hablar de Rocío Carrasco."A mí me lo habéis prohibido. Yo no he venido antes porque decía que quería defender a mi familia. Lo que ha hecho ella con todos nosotros es una barbaridad muy grande y yo no lo puedo permitir. Me decíais que estaba prohibido hablar de Rocío Carrasco", afirmó.

Bea Archidona y Santi Acosta, apoyaron a Amador y abrieron la caja de los truenos al hablar de Rocío Carrasco.  Le preguntaban que era lo que más le había dolido de su sobrina.

"Lo que más me ha dolido es que abandone a sus hijos. Sus hijos, qué culpa tienen de nada,  el niño chico, ¿qué culpa tiene? Si es un bendito. Los niños vienen a mi casa a verme y no les puedo hablar de la madre porque salen llorando. Y eso me duele, a toda la familia nos duele muchísimo", declaró con el apoyo de todos los presentes.

"Yo no he venido antes porque decía que quería hablar para defender a mi familia. Lo que ha hecho ella con todos nosotros es una barbaridad muy grande.  A mí se me decía que estaba prohibido hablar de Rocío Carrasco. Era lo que había", señalaba.

Había un micro abierto y se pudo oír “era, era”, en aquel momento Bea Archidona y Santi Acosta, aclaraban que al menos ahora se podía hablar de todo.

A mí se me decía que estaba prohibido hablar de Rocío Carrasco

Amador criticó haber sido apartado del museo de Rocío Jurado.  "Dos años trabajando en el museo con toda la creatividad mía.  Cuatro meses antes me tuve que ir...", explicaba, "ella me llamaba a mí para decir que solo yo iba a hacer bien el museo".

Recordemos que, desde la emisión del docufake de Rocío Carrasco, la familia se rompió en pedazos. Telecinco se lo jugó todo a una carta y quedó demostrado que la emisión del programa le perjudicó.

Mucha parte del público no entendía como se podía alabar y compadecer a una madre a la que sus hijos no le importaban. Rociíto, llamaba a David Flores “el ser”  y precisamente  es ese “ser” el que ha cuidado y amado a sus hijos desde el primer día.

En las redes, nunca le han aprobado su comportamiento. "Sin hijos, sin familia sin nada". "No sé cómo una marca le puede pagar a esta mujer después de lo que hizo a sus hijos", esto es solo una muestra de lo que inspira Rocío Carrasco.

Podríamos publicar varias páginas de mensajes como estos. El tiempo pasa y Rociíto no ha cambiado de opinión, sus hijos no existen para ella.