Confinada con su maltratador: el lado más dramático de la cuarentena

"Estoy confinada con mi maltratador y mi única estrategia posible es ser sumisa", ha dicho la víctima de violencia de género.

07 de Abril de 2020
Confinada con su maltratador: el lado más dramático de la cuarentena
Confinada con su maltratador: el lado más dramático de la cuarentena

El Estado de Alarma ha obligado a todos los españoles a quedarse en casa por la crisis del coronavirus aunque no todos tienen la suerte de estar en un entorno agradable.

Chloé (nombre ficticio para preservar la identidad de la víctima) tiene que pasar el confinamiento con su hija y con su todavía marido (está en proceso para divorciarse), según El Confidencial. (Un influencer retrata a la feminazi progre Lucía Etxebarría con estos datos inesperados sobre la violencia doméstica)

La mujer ha explicado al citado medio que tiene a su maltratador en casa durante la cuarentena y que no está siendo fácil el confinamiento ya que le hace la vida imposible.

"Soy como su esclava, tengo que hacer todo lo que él quiera y como quiera. Si hablo le molesta, si duermo le molesta, si no hago el baño como quiere, le molesta… Es un sin vivir las 24 horas", ha explicado.

"Estamos mi hija y yo con él y nos está poniendo en riesgo porque sale y entra cuando quiere. Yo estoy coja y no puedo salir, así que me controla la comida y la medicación, y cuando se enfada pone la música altísima para castigarnos", ha añadido Chloé.

Paloma (nombre ficticio), otra victima de violencia machista, también tiene que convivir con su maltratador en Madrid. "Ayer de madrugada sacó un cuchillo y me dijo que o me porto bien o me corta. Estoy pasando mucho miedo, dice que tiene una pistola en casa...".

"Me han dicho que ahora mismo es lo mejor que puedo hacer es ser sumisa, porque no tengo dónde ir, ni siquiera puedo salir a denunciar porque soy coja. Y se aprovecha de eso para controlarme, me corta la comida y la medicación que necesito", ha explicado a El Confidencial.

Según los datos facilitados por el citado medio, del 14 al 29 de marzo aumentaron las llamadas al 016, el número de atención a víctimas de violencia de género, en un 12,43%. Las consultas online crecieron en un 269,57% respecto al mismo periodo del año anterior. Sin embargo, el ministro Marlaska dijo que los datos de violencia de género “se habían reducido drásticamente los diez primeros días de confinamiento” y el Director General de la Policía Nacional aseguró hace unos días que las denuncian habían bajado en un 40%. (España, modelo a seguir en la lucha contra la violencia machista)

La realidad es muy distinta

Ana Bella, presidenta de la fundación con el mismo nombre, atiende a víctimas de violencia de género y ha confesado que la situación es dramática. "Estamos saturadas, todo el día al móvil. Nos estamos encontrando con todo tipo de problemáticas. Como ahora están conviviendo más y más cerca, la violencia física disminuye, también porque les pueden oír los vecinos. Pero aumenta la psicológica, el dominio, el abuso sexual… Están continuamente en tensión".

"Ya no podemos quedar a tomar un café y que nos cuenten, ir a su empresa, al parque con los niños… Ahora solo por teléfono, WhatsApp o Facebook, cuando pueden", ha añadido Ana Bella.

"Tú puedes ser una mujer maltratada, pero si puedes escapar parte del día, eso te hace estar mejor. Ahora, si tienes que estar 24 horas encerradas, ya lo ves todo. Y para muchas está siendo un revulsivo: una forma de darse cuenta de que es insostenible", ha comentado.

"Para mí, el repunte del 016 es positivo, porque demuestra que están saliendo a la luz muchas violencias invisibilizadas. Y también porque muchas llamadas son de vecinos, familiares, o compañeros de trabajo, que están identificando esos comportamientos a raíz de todo esto. Gracias a la hija de 19 años hemos conseguido llegar a su madre, y ya la estamos convenciendo para denunciar. La decimos, como a todas, que el valor que tienen para aguantar en casa con ellos, es el mismo que necesitan para salir y denunciar", ha sentenciado Ana Bella.